La ví anoche en el cine, y la verdad que debo decir que como película de acción cumple su cometido, pero si hilamos fino en comparación a las dos entregas anteriores de "Los Vengadores", deja mucho que desear.

A mi humilde criterio, es mucho mejor que "La era de Ultrón", pero no supera para nada a la primera película, donde entre otras cosas, había un villano (Loki) que no operaba desde las sombras, sino que daba la cara, y hasta participaba en la batalla.

Ésto no pasa en "Civil War": el villano de turno (Zemo, interpretado por el siempre eficiente Daniel Brühl) retoma el plan de la primera película: hacer que Los Vengadores se destruyan entre sí. Pero lo hace como si estuviera sentado en una silla, tomando una taza de café. En ningún momento tiene un papel relevante en el conflicto.

En cuanto al conflicto central, creo que para los que vimos las dos entregas anteriores, nos costará creer que esos mismos personajes empecinados en luchar contra tantos villanos, ahora tengan que verse obligados a luchar entre ellos, con la inclusión de tres nuevas caras (salen Thor y Hulk; entran Black Panther, Spider-Man y Ant-Man).

Puede que sientas más empatía por alguno de Los Vengadores en especial durante la película, pero el conflicto llega a tal magnitud, que te deja con esa pregunta en la cabeza: Al final, ¿tenía razón El Capitán América o Iron Man?

En definitiva, no creo que sea la película que ayude a redefinir el género de los Súperheroes, pero sí ayuda a abordarlo desde otro punto de vista, que es un poco distinto al que estábamos viendo últimamente.