Película interesante, ya que trata temas de gran calado aunque, como suele ocurrir a veces, se profundiza menos de lo que se podría, pero en fin, al menos es cine que hace pensar. Y además sale Spencer Tracy, y cuando sale Spencer Tracy, hay que ponerse de pie. Fredrich March también está bien, aunque le veo un pelín exagerado por momentos, en su papel de fiscal dogmático aunque cabal a su manera. Y, aunque a otras personas no, a mí me gusta el papel que hace Gene Kelly, muy alejado de su imagen habitual, como el reportero cínico basado en la figura de H.L. Mencken. En cuanto al desarrollo, habrá quien diga que la película es tramposa (todas lo son) porque la lucha es desigual: hay tontos tontísimos fanáticos contra gente razonable y culta, no hay sutiliezas, por lo cual el partido que tienes que tomar está muy claro. Es literalmente imposible que alguien empatice con el reverendo. Pero eso no la hace menos realista, no olvidemos que está basada en un hecho real, vale que de 1925, pero es que el creacionismo sigue siendo un hecho para bastante gente, en USA y en otros lugares. Y si lo trasplantamos a otros fanatismos, sean nacionalistas, políticos, etc, no veo la cosa tan descabellada, sino inquietantemente moderna y actual.

Lo que sí la veo algo tramposilla es que hay como un intento de conciliar, sutilmente incluso intenta colar que los postulados de Darwin son compatibles con el Antiguo Testamento, y no. La forma de obtener conocimiento es la ciencia, otra cosa son las creencias de cada cual, que son respetables pero están en un plano totalmente distinto.
En fin, a mí me gusta bastante. Aunque sólo fuera por Tracy, hay que verla.