Un grupo de universitarias lideradas por Violet (Greta Gerwig) tienen una forma de vivir en el campus de una manera muy peculiar hasta que se hace amiga de una recién llegada (Analeigh Tipton). Un argumento que aparentemente parece una típica película de estudiantes, el director Whit Stilman hace una película extraña, imaginaria, con unos diálogos muy bien escrito llegando a lo absurdo, un reparto femenino correcto pero no conecta. Un film extravagante difícil de ver, lo diferente a veces queda ridículo.