Con esas dos palabras quiero definir esta cinta: Entretenida, porque mantiene el interés de principio a fin, y sorprendente porque está muy bien hecha, no sólo a nivel técnico y de efecto especial, sino a nivel de un buen guión que se nutre de las pequeñas historias de los personajes, y gira en torno a la explosión del volcán.

Pierce Brosnan y Linda Hamilton pegan muy bien, se les ve naturales y muy reales en sus papeles, desde que se conocen al principio de la película hasta el final de la aventura. El resto de personajes que llenan la historia cumple también con su papel y no nos dejan caer en el aburrimiento, sino que amenizan y hacen interesante el conjunto. Nada sobra y casi nada falta en la pantalla.
Ayudan mucho también los espectaculares exteriores y un score de calidad, que junto con alguna escena entrañable y la acción espectacular del final cierran un espectáculo que merece mucho la pena ver.

Recomendable para los amantes del cine catastrófico para toda la familia.