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Thriller. Intriga
La memoria de Leonard, un investigador de una agencia de seguros, está irreversiblemente dañada debido a un golpe sufrido en la cabeza cuando intentaba evitar el asesinato de su mujer: éste es el último hecho que recuerda del pasado. La memoria reciente la ha perdido: los hechos cotidianos desaparecen de su mente en unos minutos. Así pues, para investigar e intentar vengar el asesinato de su esposa tiene que recurrir a la ayuda de una ... [+]
17 de julio de 2012
3 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
Leonard (Guy Pearce) es un tipo listo, que sabe evaluar a la gente a simple vista: trabaja para una compañía de seguros, interroga a quienes pretenden engañar a su empresa y determina cuándo es pertinente pagar una indemnización a las personas investigadas (si no existe fraude en su reclamación). ¿Su secreto? Confiar en hechos, no en su propia memoria... "porque ésta distorsiona la realidad".
Sin embargo, un hecho cambia abruptamente su vida: una noche, un desconocido entra en su casa, viola su mujer la y la asesina; cuando Leonard descubre al agresor, intenta atraparlo... pero recibe un golpe en la cabeza que le causa una extraña enfermedad: amnesia anterógrada (es decir: tiene recuerdos antiguos, pero no es capaz de 'almacenar' los recientes… los ‘creados’ después de aquel incidente).
Leonard expone el caso a la policía, pero los agentes no se interesan por su historia; él no se da por vencido y decide buscar al asesino de su mujer, para matarlo. Sabe que, una vez lo logre, no será capaz de recordar ni el hecho ni la sensación de alivio que anhela sentir... pero su decisión es firme, porque su mujer "lo merece".
Para conseguir su objetivo necesitará recurrir a notas, que irá tatuando en su cuerpo, y fotografías con pequeños mensajes explicativos... durante el film, el protagonista se cruza con una multitud de personajes que, en realidad, no son como parecen a primera vista: Teddy (Joe Pantoliano), Natalie (Carrie-Anne Moss), Burt (Mark Boone Junior), Dodd (Callum Keith Rennie) y Jimmy (Laurence H. Holden).
Durante sus investigaciones, Leonard siempre tendrá presente la historia de Sammy Jankis (Stephen Tobolowsky), un hombre que sufrió en el pasado la misma enfermedad que él mismo padece, y cuyo extraño caso estudió…
Sin embargo, un hecho cambia abruptamente su vida: una noche, un desconocido entra en su casa, viola su mujer la y la asesina; cuando Leonard descubre al agresor, intenta atraparlo... pero recibe un golpe en la cabeza que le causa una extraña enfermedad: amnesia anterógrada (es decir: tiene recuerdos antiguos, pero no es capaz de 'almacenar' los recientes… los ‘creados’ después de aquel incidente).
Leonard expone el caso a la policía, pero los agentes no se interesan por su historia; él no se da por vencido y decide buscar al asesino de su mujer, para matarlo. Sabe que, una vez lo logre, no será capaz de recordar ni el hecho ni la sensación de alivio que anhela sentir... pero su decisión es firme, porque su mujer "lo merece".
Para conseguir su objetivo necesitará recurrir a notas, que irá tatuando en su cuerpo, y fotografías con pequeños mensajes explicativos... durante el film, el protagonista se cruza con una multitud de personajes que, en realidad, no son como parecen a primera vista: Teddy (Joe Pantoliano), Natalie (Carrie-Anne Moss), Burt (Mark Boone Junior), Dodd (Callum Keith Rennie) y Jimmy (Laurence H. Holden).
Durante sus investigaciones, Leonard siempre tendrá presente la historia de Sammy Jankis (Stephen Tobolowsky), un hombre que sufrió en el pasado la misma enfermedad que él mismo padece, y cuyo extraño caso estudió…
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
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spoiler:
Interesantísima propuesta, tanto por el guión de la historia como por el modo en que se desarrolla la trama: aquello que se muestra 'en color' avanza en un sentido cronológicamente inverso (desde el final hacia el principio), mientras que las escenas en 'blanco y negro' sí tienen un avance temporal lineal…
La historia viene a ser, según creo, la siguiente: Leonard llega a un pueblo, siguiendo la pista del supuesto asesino de su mujer (un tal John G., varón de raza blanca, dedicado a la venta de drogas); allí se cruza con Teddy, un supuesto soplón de la policía que le va a ayudar a encontrar al asesino de su esposa; sin embargo, Teddy es un policía corrupto que iba a hacer un negocio sucio con un camello local, Jimmy (el novio de Natalie): una venta de drogas, por valor de 200.000 dólares. El poli le da la mercancía incautada al camello y éste paga por los narcóticos una importante suma de dinero.
La idea de Teddy es vender las drogas y después animar a Leonard a matar a Jimmy, haciéndole creer que el citado camello es quien asaltó la casa de Leonard y mató a su esposa: así Teddy se cubre las espaldas, en caso de que alguien investigue (en el futuro) el asesinato de Jimmy.
Los problemas aumentan cuando uno de los socios de Jimmy, llamado Todd, comienza a impacientarse: ha aportado 200.000 dólares y no tiene ni drogas ni dinero; comienza a importunar a Natalie y ésta, atemorizada, decide aprovecharse del pobre Leonard: se hará pasar por una inocente chica, maltratada por su violento novio… cuando ella sabe perfectamente que Jimmy está muerto; así, Natalie quiere emplear a Leonard para deshacerse de Todd… y de Teddy.
La sorpresa final se da cuando Teddy le revela a Leonard que todo es una gran mentira: el protagonista del film es, en realidad, el propio Sammy Jankis y ha distorsionado sus propios recuerdos: su mujer no murió en el ataque del violador, sino tiempo después… en fin, todo un lio mental (que, por cierto, me recuerda bastante el ‘recuerdo distorsionado’ de Bruce Willis en el desenlace del film ‘Doce monos’).
El final me encanta: Leonard arroja por el retrete esos grandes principios que había defendido durante todo el film (“creo en hechos, no en recuerdos; no puedo matar a alguien si no estoy completamente seguro de ello”) y acaba eligiendo la ‘realidad’ que le resulta más cómoda (curiosamente, como Joe Pantoliano en ‘Matrix’), ya que es incapaz de aceptar lo que le está diciendo Teddy (que es la cruda verdad).
¿Tiene fallos la trama? Pues sí, pero centrarse en ellos me parece pueril: es como si alguien te señala la luna y te quedas mirando la mugre de la uña de la persona que te señala el astro. Yo creo que la historia es (parcialmente) engañosa, pero está bien trabajada, y cuenta con una dirección ágil, unos diálogos bien elaborados y una acertada interpretación de los tres personajes principales.
En la edición 2001 de los Oscar, estuvo nominada en dos categorías: Mejor Guión Original y Mejor Montaje.
La historia viene a ser, según creo, la siguiente: Leonard llega a un pueblo, siguiendo la pista del supuesto asesino de su mujer (un tal John G., varón de raza blanca, dedicado a la venta de drogas); allí se cruza con Teddy, un supuesto soplón de la policía que le va a ayudar a encontrar al asesino de su esposa; sin embargo, Teddy es un policía corrupto que iba a hacer un negocio sucio con un camello local, Jimmy (el novio de Natalie): una venta de drogas, por valor de 200.000 dólares. El poli le da la mercancía incautada al camello y éste paga por los narcóticos una importante suma de dinero.
La idea de Teddy es vender las drogas y después animar a Leonard a matar a Jimmy, haciéndole creer que el citado camello es quien asaltó la casa de Leonard y mató a su esposa: así Teddy se cubre las espaldas, en caso de que alguien investigue (en el futuro) el asesinato de Jimmy.
Los problemas aumentan cuando uno de los socios de Jimmy, llamado Todd, comienza a impacientarse: ha aportado 200.000 dólares y no tiene ni drogas ni dinero; comienza a importunar a Natalie y ésta, atemorizada, decide aprovecharse del pobre Leonard: se hará pasar por una inocente chica, maltratada por su violento novio… cuando ella sabe perfectamente que Jimmy está muerto; así, Natalie quiere emplear a Leonard para deshacerse de Todd… y de Teddy.
La sorpresa final se da cuando Teddy le revela a Leonard que todo es una gran mentira: el protagonista del film es, en realidad, el propio Sammy Jankis y ha distorsionado sus propios recuerdos: su mujer no murió en el ataque del violador, sino tiempo después… en fin, todo un lio mental (que, por cierto, me recuerda bastante el ‘recuerdo distorsionado’ de Bruce Willis en el desenlace del film ‘Doce monos’).
El final me encanta: Leonard arroja por el retrete esos grandes principios que había defendido durante todo el film (“creo en hechos, no en recuerdos; no puedo matar a alguien si no estoy completamente seguro de ello”) y acaba eligiendo la ‘realidad’ que le resulta más cómoda (curiosamente, como Joe Pantoliano en ‘Matrix’), ya que es incapaz de aceptar lo que le está diciendo Teddy (que es la cruda verdad).
¿Tiene fallos la trama? Pues sí, pero centrarse en ellos me parece pueril: es como si alguien te señala la luna y te quedas mirando la mugre de la uña de la persona que te señala el astro. Yo creo que la historia es (parcialmente) engañosa, pero está bien trabajada, y cuenta con una dirección ágil, unos diálogos bien elaborados y una acertada interpretación de los tres personajes principales.
En la edición 2001 de los Oscar, estuvo nominada en dos categorías: Mejor Guión Original y Mejor Montaje.