Tarde de cine con amigos, nos apetece acojone, y aunque esta película pintaba mal, no había otra, así que nos refugiamos en los cuatro o cinco sustos que nos deparaban.
Sacamos nuestras entradas por unos cómodos 7,70€, buen precio (incluso pensé en pagarle 10€, soy de derrochar por ver mierda), compramos nuestras palomitas, de esas que te dejan una hacha clavada en la espalda y un puñal en el pecho y nos metimos en la "mini" sala donde se proyectaba la obra maestra.
Nos acomodamos en las butacas listos para el show.
Comienza la proyección de estiércol en HD, paraguas preparados, esto va a salpicar...
No voy a entrar a describir la película, no quiero perder el tiempo. Pero si alguien necesita una descripción rápida para decidir si ir a verla, es sencillo, al terminar de cagar, sin dar tiempo a que el aroma se extienda, coloca tu cabeza sobre el agujero del váter y mientras observas la obra maestra, aspira.