Esta película tiene algo muy especial que hace que a pesar de sus defectos sea grande, y que yo le otorgue una buena nota: su personaje principal, y no estoy hablando del actor ni de su actuación (que es muy buena por cierto), sino del verdadero Confucio.
A partir de ahí podemos empezar a poner peros, que los hay, pero si tenemos una película con los ingredientes necesarios bien puestos y a una figura de la talla de este filósofo, pero ante todo ser humano, a mí por lo menos me basta y me sobra.
Es una pena que el resultado no haya sido algo más profundo y que además haya ciertas incongruencias en el guión, pero esto para nada afecta en el mensaje final, y además tampoco es que sea una película mala, está bien hecha, con buenos efectos y unos escenarios impresionantes.
A mi me ha entretenido, he aprendido algo de historia y sobre todo he disfrutado viendo a una persona con buenos valores. ¿Las seguirá habiendo por aquellos lares? porque lo que es por aquí desde luego se echan mucho en falta.
Saludos.