Ilustro esta pequeña crítica con esta desgarradora frase aparecida en algún momento de la película. El interrogante es, especialmente en la cuestión de la mujer, la reflexión principal del film. Una respetable y nunca innecesaria pregunta que Rodrigo García hace con muy buenas intenciones pero no tan buenos resultados: un montaje aburridísimo y con sensación de estar incompleto, algunas sorpresas que nada tienen de inesperado y un final a mi parecer inadecuado.

Aunque también hay que tener en cuenta que se trata de la adaptación de una novela, cuya trama debe transformar a 108 minutos de cinta y a la que, de forma más o menos exacta, debe serle fiel. Por todo ello, un 6.

PD: buenísima la actuación y perfectamente caracterizada Glenn Close.