Aguanté hasta el final más que nada por ver si volvía a salir la enfermera, bastante mona, ya me gustaría a mí que alguna vez en mi mísera de vida de súbdito contribuyente me hubiera vacunado una mujer así...

La película, panfleto, pero total, típico bodrio yanqui, vamos que no se dice ni mu, pero ni mu de las hipótesis que apuntan a que aquello fue una autoagresión para poder hincarle el diente al imperio japonés (ahora tenemos bases yanquis por toda Asia, no democracia, bases yanquis).

El cine, miren, es un medio de ilustración pero también de contaminación y se usa para doblegar mentes, y los yanquis son especialistas en eso, vamos que Goebbels a su lado es un aprendiz.

La película patriotera a más no poder, todos unos héroes musculados y virtuosos... Yo es que me parto con estos pavos de Hollywood, vaya fábrica de mentiras y de estulticia... No hay peores soldados que los yanquis, violadores, borrachos, cafres... para qué seguir.

La beldad es inglesa, por cierto. Tiene una elegancia que no se da entre los comedores de hamburguesas.