Hugo Blick (al que recordamos por las fantásticas The Shadow Line o The Honourable Woman) nos ofrece en The English un incomparable espectáculo visual que se adentra en la tendencia actual del western de despojar de las historias del lejano oeste cualquier tipo de glamour proveniente del cine clásico y mostrar el verdadero infierno que debió de ser de forma mucho más explícita, algo que de sin duda ya hicieron Sergio Leone o Sam Peckinpah, e incluso Ford y Anthony Mann, aunque estos siempre se aferraban a los héroes o al resquicio de esperanza presente en la humanidad del individuo o del colectivo de personas buenas, algo de lo que prescinde por completo el western actual y desde luego The English donde el odio y la venganza son los elementos que mueven a la práctica totalidad de personajes.

Al igual que en la fascinante Godless de Scott Frank (otra mujer "fuerte" interpretada entonces por Michelle Dockery) o diversos largometrajes recientes, como "El poder del perro" de Jane Campion, "Noticias del gran mundo" de Paul Greengrass, "Los hermanos Sisters" de Jacques Audiard, la brutal "Bone Tomahawk" de S. Craig Zahler, la maravillosa "La balada de Buster Scruggs" de los Coen o la fascinante "Deuda de honor" de Tommy Lee Jones, se nos muestra (detrás de escenarios naturales de extraordinaria belleza) un contexto terrible, feroz, nocivo, agresivo e implacable con los débiles, salvaje con la mujeres, demoledor con la naturaleza y en el que tuvo lugar uno de los más cruentos genocidios que se han conocido que Hugo Blick narra a través de la masacre de Chalk River. Un infierno sin paliativos en el que los héroes clásicos no tienen cabida y en el que no se oculta la podredumbre ni la brutalidad.

En este contexto, surge el romance entre dos personajes fantásticos con una química brutal y magníficas interpretaciones a cargo de Emily Blunt y Chaske Spencer. Una relación herida de muerte de forma trágica desde el principio pero que aporta momentos muy líricos. A destacar también el resto de secundarios, menuda colección de fantásticos personajes, algunos descritos en apenas unos esbozos.
Algún episodio más disperso y alguna trama un tanto enrevesada quizá sea el único lastre de una serie de seis capitos finalmente excelente y donde el rastro de Anthony Mann, Clint Eastwood, Peckinpah, Monte Hellman y Tarantino (lo que gusta sentarse en una mesa a hablar antes de degollarnos unos a otros) está muy presente, porque existe cierto clasicismo en la narración, los amantes del gore no hallarán aquí demasiado material que les satisfaga (por suerte). Producida por Amazon y emitida por HBO (¿?)