Tras el éxito cosechado con A Todo Gas en 2001, un año después tanto el director como uno de los actores principales de aquel film, Rob Cohen y Vin Diesel respectivamente, se unieron para meterse en otra fantástica aventura titulada Triple X (2002). Pareció funcionar muy bien en taquilla. El caso es que, en 2005 se estrenó una secuela con el título xXx2: Estado de emergencia. Ya no estaban ni Cohen ni Diesel, en su lugar fueron reemplazados por Lee Tamahori y Ice Cube. La cosa no cuajó entre el público. Han pasado más de diez años para que Diesel se pronunciara sobre la realización de una nueva entrega. Ya no vuelve el director de la primera, pero no es motivo de tristeza, D.J. Caruso lo ha hecho genial. Para quién no lo sepa, es el drector de grandes títulos como Vidas ajenas (2004) con Angelina Jolie, Disturbia (2007) con Shia LaBeouf o la infravalorada Soy el número cuatro (2011) con Alex Pettyfer y Timothy Olyphant.
Esta tercera parte, en mi opinión, vuelve a sus inicios, con ese toque de fast and furious, repleto de personajes, y cada cual tiene sus cosas que decir. Junto a Diesel podemos ver de nuevo a Samuel L. Jackson con esos toques para la comedia. Además, entran en el equipo, entre otros, Deepika Padukone, Donnie Yen (visto en Rogue One: Una historia de Star Wars) y las televisivas Nina Dobrev (la inolvidable Elena Gilbert de The Vampire Diaries) y Ruby Rose (de la serie Orange is the new Black). En lo más alto podemos vislumbrar a Toni Collette, con un personaje que le iría de miedo a Charlize Theron.
Ya he dicho que con tantos actores en el grupo esto parece un fast and furious, y no solamente en esto. Las fantasmadas por fotograma corren a sus anchas. Es un film para dejar el cerebro fuera de la sala, no pensar y disfrutarlo desde el principio hasta el inicio de los créditos finales. No ganará ningún premio de la academia, pero ha sido un notable pasatiempo, mucho mejor de lo esperado, sinceramente. Con unas buenas coreografías, unos decentes efectos visuales, alguna que otra sorpresa inesperada y una marchosa partitura a cargo de Robert Lydecker y Brian Tyler, este film hará las delicias de los fans de la primera, de los que haya de la segunda o de los que quieran pasar cerca de dos horas muy entretenidas. Mi nota final es de 8/10.