Jungle Cruise (2021) está inspirado en la emblemática atracción del Magic Kingdom (el Reino Mágico de Disneylandia). Se trata de una de las 22 atracciones originales que el parque tenía cuando abrió en 1955, donde los participantes viajaban a través de un río en medio de una jungla guiados por un capitán, encontrando criaturas salvajes en el camino, como pirañas y gorilas. No he ido nunca a esta atracción, al igual que no fui a la de Piratas del Caribe, pero eso no me impidió disfrutar a tope, en su momento, de la saga de Piratas del Caribe con el personaje de Jack Sparrow (interpretado por el gran Johnny Depp) en la cabeza del reparto, y con la que ahora nos ocupa me ha pasado tres cuartos de lo mismo. Sin duda, no voy a hacer comparaciones porque estamos antes dos películas bien diferentes y no se parecen en nada, salvo en que ambas se inspiran en atracciones de Disneylandia.
Disney, para el proyecto, pensó en fichar a Jaume Collet-Serra, un director bastante infravalorado, nacido en Barcelona y afincado en Estados Unidos desde hace bastantes años, pero que ha sabido elaborar muy buenas películas como su ópera prima "La casa de cera" (2005) con Elisha Cuthbert o Infierno azul (2016) con Blake Lively. Para la ocasión, Serra ha sabido reunirse de un buen equipo y un buen reparto que está encabezado por Dwayne Johnson y Emily Blunt, y es que la química entre ellos llega a ser innegable. Junto a estas dos estrellas podemos ver a Jesse Plemons (Friday Night Lights), Edgar Ramirez (Bright), Jack Whitehall (la miniserie Good Omens), Paul Giamatti (San Andrés junto al mismo Dwayne Johnson), y a unos casi irreconocibles Dani Rovira y Quim Gutiérrez. He de reconocer, que cuando una película no me gusta lo digo, pero es que este film me ha enganchado desde el principio y no me ha soltado hasta el final.
Lo admito, no es perfecta, pero ¡caray! consigue hacerte pasar un buen viaje (nunca mejor dicho) y entretenerte mucho durante algo más de dos horas. Duración que, a priori, parece mucho, pero que se pasa volando. No sé cuánto habrá sido su presupuesto, pero se nota hasta su último centavo invertido. El tándem Johnson y Blunt está muy visible a la largo de todo el metraje, junto a una notable, movidita y emocionante trama. Los efectos visuales, en líneas generales y gracias a compañías tales como Digital Domain, Industial LIght and Magic o DNeg, están muy bien. Podría mencionar, sin hacer spoilers, a Próxima, llega a ser bastante realista. En el apartado musical tenemos al compositor James Newton Howard que ha creado unos temas muy aventureros y que casan muy bien a lo largo de toda la travesía, Realmente están para quitarse el sombrero.
Si queréis pasar una aventura adrenalínica, sin moveros de la butaca de una sala de cine o del sofá de vuestra casa (ya dependería de cada uno), tenéis una cita con este nuevo film distribuido por Disney, apto para todos los públicos, con un buen y simpatico reparto, y llevado a muy buen puerto por un director al que le deseo todo lo mejor. Se lo merece. Por mi parte, ya he dicho lo que quería decir. Ahora dependerá de ti, cuando la hayas visto, mencionar si te ha gustado o te ha hecho perder un tiempo valioso. Mi nota final es de 8.5/10.