Desde luego no está destinada a entretener a toda esa caterva de palomiteros seguidores de la acción y los efectos visuales que pululan por los cines hoy en día. La película trata de ir más allá en muchos de los aspectos en las que otras fallan. Se pregunta por las personas, que son las grandes afectadas en este tipo de catástrofes; por lo que sienten, por cómo viven, por sus aspiraciones. Lo que sucede es que se queda a medias y no logra involucrarse por completo; permanece algo distante y fría. Es cierto que en alguna ocasión lo intenta y lo logra, pero suponen meros atisbos aislados en el conjunto. Por lo demás es más que correcta, y constituye un producto decente de entretenimiento llano.