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Voto de estaeslacosa:
5
Serie de TV. Drama. Thriller Miniserie de TV (2011). 2 episodios. Basada en la vida del político vasco Mario Onaindia, nacido en Bilbao en 1948. Socialista, intelectual y ex miembro de ETA político militar -en 1970 en el proceso de Burgos contra varios miembros de ETA fue condenado a muerte-, Onaindia se apartó de la violencia y participó activamente en la política vasca durante muchos años. Falleció en 2003. (FILMAFFINITY)
23 de diciembre de 2018
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Quiero empezar diciendo que siento un gran respeto por la historia política de Mario Onaindía quien, al igual que el ex presidente uruguayo Pepe Mujica, pasó de la cárcel, las torturas y las condenas por terrorismo, incluyendo la pena de muerte, a la libertad, el respeto y la democracia bien entendida.
Nada nuevo para quien leímos las memorias de Onaindía en un libro que lleva el mismo título del telefilm o miniserie, que en su primera parte cuenta la misma historia que Imanol Uribe en su película “El Proceso de Burgos” estrenada en 1979 y narrada por los mismísimos procesados y algunos de los abogados y, por cierto, bastante más creíble y contundente que lo que ahora se critica, y todo eso sin hablar del libro “El Proceso de Euzkadi en Burgos, 31/69” editado por Ruedo Ibérico en 1971 en París y escrito bajo pseudónimo por Kepa Saliberri que no es otro que Francisco Letamendía, abogado defensor de Mario Onaindía en el citado juicio. El gran error del sistema de entonces fue no haber previsto que los acusados se podrían convertir en acusadores, como así fue, y todo ello con la lógica divulgación de todos los medios mundiales que obligaron a Franco a hacer uso de una palabra, un concepto, que creíamos no existía en el diccionario del Dictador, la piedad. La historia casi 5 años después demostró la terrible verdad sobre el “pío y católico” personaje que sí se ratificó en la condena a muerte de 5 españoles.
Pero vayamos a la miniserie, muy buenas intenciones, pero Mario Onaindía se merecía algo más, se merecía que el casting hiciera una mejor selección de actores para reencarnar a ese hombre voluminoso y cara de bonachón, porque Gutiérrez nunca supo meterse en el personaje, pulula por la cinta sin saber quién era el verdadero Mario. Sin embargo desde el minuto uno se podía reconocer físicamente al compañero de Mario, Teo Uriarte, ¿por qué no hicieron lo mismo con el protagonista?.
Hay situaciones que no superan la nota mínima del dramatismo, hablo de la actriz que da vida a la madre de Mario que parece sacada de una película de Navidad de la factoría Disney, hablo del padre (gran actor en otras películas) que tiene tremendos altibajos en su interpretación, hablo de los militantes juzgados cuando se les comunica que han sido condenados a muerte, su reacción es similar a la que se experimenta cuando a uno le dan los resultados del último partido de fútbol, y aquí uno no puede evitar comparar la mala dirección de esta película con la que es capaz de trasmitir Huerga en su película de parecida historia “Salvador (Puig Antich)”. Hablo de la poca credibilidad que tienen los discursos de los protagonistas cuando hablan de la lucha obrera y de su lucha reivindicativa. Hablo del poco partido que se le saca al juicio cuando en sí mismo representa uno de los episodios más interesantes de la historia reciente de España.
Para acabar, hay un tremendo error en el discurso en off de Franco en el balcón del Palacio de Oriente de Diciembre de 1970 que confunden con las imágenes y consignas de otro en el mismo sitio y la misma razón por la cual tuvo que salir al balcón el Dictador en Octubre de 1975, esa fue la última vez que se le vio de pie y, por ende, con vida.
Todo lo que escribo se refiere a la primera parte de las dos que consta la miniserie, la segunda no pude verla por respeto a Mario Onaindía.
A destacar y agradecer los 2 minutos que se le conceden a Javier Krahe, todo un detalle que se agradece.
estaeslacosa
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