Mira que me sabe mal puntuar así esta obra, pero de verdad que tiene fallos imperdonables.

Lo que salva de la quema es su aspecto visual y las interpretaciones (bastante sencillo viendo la colección de estrellas en pantalla).

Por un lado tenemos la duración. Lo que nos quieren contar empieza muy bien, generando interés y motivando al espectador para ver como se desarrolla. El problema está en que según pasas los minutos la trama avanza lentamente y por momentos ni avanza. O le sobran minutos o necesita más chicha en su historia.

Por otro lado tenemos el desarrollo que nos plantea. A poco que uno preste atención, sin necesidad de ser Sherlock Holmes, sabes perfectamente lo que ocurrirá y como se desarrollará la historia de cada personaje (especialmente el protagonista Bradley Cooper).

En conjunto vemos una gran factura pero le falta guión, o le sobra metraje e incluso puede que requiera más ritmo. O simplemente sea un poco de las tres cosas las que dan un resultado flojo de algo que pudo ser mucho más.