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Voto de El Extranjero :
6
5,5
5.535
Thriller
Patricia es una abogada que ve su vida trastornada cuando su hijo Víctor desaparece del colegio. Cuando el niño regresa a casa, asegura que un hombre ha intentado secuestrarlo y lo reconoce en una rueda de identificación. Pero como las pruebas no son definitivas, el sospechoso queda en libertad. Temerosa de que algo pueda pasarle a su hijo, Patricia decide quebrantar sus principios y tomarse la justicia por su mano, lo que acabará ... [+]
19 de enero de 2017
12 de 17 usuarios han encontrado esta crítica útil
Vamos a hacer algunos comentarios a la zona spoiler.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
Ver todo
spoiler:
El guión utiliza la trama de la primera mitad de la película como mero soporte para engendrar el que es el auténtico eje del filme, sobre el que se sustenta todo el sentido de la historia. Dicho 'eje' no es otro que Coronado birlándole el dinero a Blanca Portillo y dejándola con un marrón importante con la justicia, pues el personaje de 'Charly' (un buen Andrés Herrera) está vivo y no muerto, siendo ese el desencadenante de la ira de los matones contratados por Coronado para 'asustar' a Charly a petición de Portillo.
Aunque si he entendido bien, Portillo (la abogada Patricia) no puede tener problemas con la policía como tal porque no se puede demostrar que fuera ella la que pidió 'el favor' a Coronado. La pérdida de dinero y el engaño acerca de la muerte de Charly (lo cual la llevó a actuar de una manera desesperada) sería lo único que explicaría su grito de rabia con el que se cierra la película.
La interpretación más sencilla que se puede esgrimir de 'Secuestro' se reduce a que Patricia tiene (o cree tener) un problema, recurre a su antiguo ex-marido, pero este en vez de ayudarla la jode del todo. Ha sido como un regalo inesperado, caído del cielo el que Patricia recurriera a él.
No obstante, otra más conspiratoria e improbable por extrema es que Coronado y sus matones tuvieran planeado el que Patricia acudiera a ellos en busca de ayuda si creyera que hay una persona que pueda estar acosando a su hijo. A primera vista no hay motivo que inviten a considerar siquiera tal casi surrealista propuesta pero hay un detalle que entonces no quedaría explicado: ¿la sombra que Patricia vio una noche en su jardín de quién era entonces?
De todas maneras en su segunda mitad la película pierde credibilidad. Llega un momento en el que el devenir de las circunstancias se deposita con abusiva frecuencia en las manos de lo improbable y la hasta entonces muy interesante película pierde enteros por falta de credibilidad. Oriol Paulo podrá jactarse de que no ha engañado a nadie con las intrincadas pistas que ha planteado, pero la impresión final no es sobresaliente.
Aunque si he entendido bien, Portillo (la abogada Patricia) no puede tener problemas con la policía como tal porque no se puede demostrar que fuera ella la que pidió 'el favor' a Coronado. La pérdida de dinero y el engaño acerca de la muerte de Charly (lo cual la llevó a actuar de una manera desesperada) sería lo único que explicaría su grito de rabia con el que se cierra la película.
La interpretación más sencilla que se puede esgrimir de 'Secuestro' se reduce a que Patricia tiene (o cree tener) un problema, recurre a su antiguo ex-marido, pero este en vez de ayudarla la jode del todo. Ha sido como un regalo inesperado, caído del cielo el que Patricia recurriera a él.
No obstante, otra más conspiratoria e improbable por extrema es que Coronado y sus matones tuvieran planeado el que Patricia acudiera a ellos en busca de ayuda si creyera que hay una persona que pueda estar acosando a su hijo. A primera vista no hay motivo que inviten a considerar siquiera tal casi surrealista propuesta pero hay un detalle que entonces no quedaría explicado: ¿la sombra que Patricia vio una noche en su jardín de quién era entonces?
De todas maneras en su segunda mitad la película pierde credibilidad. Llega un momento en el que el devenir de las circunstancias se deposita con abusiva frecuencia en las manos de lo improbable y la hasta entonces muy interesante película pierde enteros por falta de credibilidad. Oriol Paulo podrá jactarse de que no ha engañado a nadie con las intrincadas pistas que ha planteado, pero la impresión final no es sobresaliente.