Haz click aquí para copiar la URL
Rusia Rusia · Stalingrado
Voto de Ferdydurke:
8
Serie de TV. Western. Drama Serie de TV (2004-2006). 3 temporadas. 36 episodios. Ambientada en los Estados Unidos, en la época de la fiebre del oro (1876). Poco después de la última acción del general Custer, en Black Hills surge una ciudad fronteriza, que es testigo de la implacable lucha de los pioneros por el poder. Entre los colonos había gente muy heterogénea: un hombre de leyes retirado, el intrigante propietario de un salón, el legendario Wild Bill Hickok o ... [+]
6 de diciembre de 2015
5 de 6 usuarios han encontrado esta crítica útil
Si fuésemos malos, casi como Al, podríamos decir que es una serie que empezó muy tarde y acabó demasiado pronto. Cuando cogió el ritmo y se acabó la exposición, ya estaba terminando la primera temporada. Cuando la trama iba viento en popa a toda vela y los personajes estaban explicados y matizados, finalizaba la tercera y, desgraciadamente, la serie.
Pero seamos buenos como... tantos, Bullock, Utter, Joanie, Jane, Alma... y digamos que aunque quedase truncada, mutilada y mal cerrada, abandonada y dejada de la mano de Dios, lo que duró, 36 capítulos de vellón, fue suficiente, una fiesta, un revoltijo feliz de vísceras y monólogos, un carnaval bien humorado y sangriento.
Serie contrahecha y desmadejada, llena de estropicios y desvíos. Muy violenta y nada perfecta. Pero en ella cabe toda la vida; todo el arco, desde el barro más fangoso hasta la literatura más exquisita y el humor más grueso, desde los mitos puros hasta la pocilga más lumpen. Mezcla brillante de realidad, de hecho, muchos personajes existieron realmente, y ficción, acaba siendo el fresco glorioso de unos tiempos revueltos y terribles (después de la guerra civil norteamericana). Como una enorme obra de teatro en medio de la tierra más inhóspita y cruel (en un lugar sin ley; terreno robado a los indios).
Nos habla de cómo se creó USA, desde cero, a fuerza de injusticia y amoralidad. Nos muestra un tiempo sin piedad, precivilizado. Y nos explica el proceso de legalización, de institucionalización. Cómo se pasó del degollamiento carnicero al sableo leguleyo, del tiro y tentetieso a las amañadas elecciones y los facinerosos manejos políticos. Y todo ello aliñado con personajes esculpidos con toneladas de verdad y sarcasmo; llenos de entrañas ulcerosas y palabras ácidas como puñales envenenados.
Es, también, un tratado sobre las humillaciones; observamos espantados mil y un vejaciones; las relaciones humanas convertidas en la representación de una abrumadora e inclemente jerarquía, depredadora y atroz.
El tono es amplio. Enorme gama de registros y voces. Hay esperpento, mascarada, drama, reflexión y mucho cachondeo. Humor simple e ironía sutil. Lo grotesco y lo fino conviven alegremente en un continuo narrativo tan rico como agraz.
Fábula moral en la que las fuerzas del mal combaten contra las del bien. Así comienza, con brutalidad y cierto maniqueísmo. Pero según se va desarrollando, los papeles se oscurecen, los enemigos se alían y todo se complica; se sigue peleando, pero ya es más difícil distinguir el lugar de cada uno en la comedia/tragedia, todos acaban cediendo y negociando, los que sobreviven por lo menos, que no son tantos. Una visión del mundo terrible, en la que no hay lugar para la debilidad y sí, sobre todo, para la fuerza y la inteligencia. Sin negar por ello ni mucho menos el poder de la lealtad y el grupo, la necesidad de ayudarse y colaborar.
Western revisionista y apocalíptico que sigue la estela de clásicos como Hawks y que se reconoce en el legado de los más modernos Leone, Peckinpah o Eastwood. De "El Dorado" a "Sin perdón" pasando por la literatura de, por ejemplo, Oakley Hall.
Putas y asesinos. Mineros y patronos. Casi no caben las familias, los niños (aunque una niña es en cierto modo el corazón inocente de la historia, su referente ético, el calor humano tan pisoteado, ese santo grial por el que merece la pena luchar y hasta morir, el desencadenante de todo) o el amor (que también lo hay, por ejemplo: Bullock y la viuda, Trixie y Sol, Jane y Joani al final), ya que reina sobre todo un tremendo recuento de carnicerías y atropellos.
De entre todos ellos se puede decir que emerge como titán infinito el bueno de Al. El inglés. El maquiavélico y shakespereano personaje. El que mueve los hilos. El hombre (in o contra) moral, la que consiste en asumir tus intereses, y los de los tuyos en (mucha) menor medida, como la única ley, ante la que no ha lugar a hipocresías, medias tintas, amabilidades o cualquier forma de cobardía o duda. Capaz de asumir, como una aspiradora humana, casi como el negro bueno de La milla verde, todo el mal de los demás con el único objetivo, ahí difiere radicalmente del otro héroe, de mantener un statu quo del que pueda sacar el máximo beneficio. El mercader, el proxeneta. Un malvado inteligente, hábil y leal que conduce a su grey con mano de hierro y cintura de corista ( solo a veces). No tiene compasión, tampoco es gratuito ni superfluo en su maldad. Todo obedece a una razón, la suya. Estrategia y control. Comenzó como fantoche sádico y temible y fue ganado en humanidad y alcance, mejorando como personaje, cada vez más matizado y creíble.
Su reverso moral sería Bullock. El bien a lo bruto. La bondad como enfermedad. La rectitud como compulsión irreprimible. Siempre superado por el mal del mundo. Siempre en guerra con todos (contra sí mismo especialmente), contra la imperfección de la vida. El retrato de un idealista puro, de un puritano máximo que en alguna ocasión está a punto de inmolarse, de preferir la muerte a la confusión o la duda. Pero también aprende y evoluciona, sobrevive cediendo y siendo progresivamente más humano.
Y más tarde aparece el último depredador, el definitivo. En la escala evolutiva del espanto es el monstruo más capacitado. Un leviatán del Oeste. George Hearst. El horror en estado puro, metafísicamente perfecto. Sin fisuras. Solo voracidad económica, sin motivo ni horizonte más que el hecho acumulativo en sí mismo, desnudo, caníbal, pulverizador. El progreso encarnado. El gran dinero entrañado. El oro es su sangre.
Y hay muchos más regalos, como en día de reyes.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
Ferdydurke
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow