Haz click aquí para copiar la URL
España España · MADRID
Voto de ELZIETE:
9
Western. Drama A Wyatt Earp (Henry Fonda), antiguo sheriff de Dodge City, le ofrecen el puesto de comisario de la ciudad de Tombstone, pero lo rechaza porque le interesa más el negocio ganadero al que se dedica con sus hermanos. Sin embargo, cuando uno de ellos muere asesinado, acepta el puesto vacante y nombra ayudantes a sus hermanos. Contará también con la amistad y la colaboración de un jugador y pistolero llamado Doc Holliday (Victor Mature). (FILMAFFINITY)  [+]
12 de julio de 2016
1 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
Antes que nada hay que ponerse en pie y quitarse el sombrero aunque sea metafóricamente ante la sublime fotografía del mexicano Joseph MacDonald incomprensiblemente no premiada.
Oscar honorifico también a las nubes, nunca tan bellas, de Arizona y Utah donde se rodó.
Dado que la historia se sustenta sobre personajes reales, hay que decir que a pesar de que Ford llegó a conocer a Wyatt Earp y que coreografió el famoso duelo en el O.K. Corral según sus indicaciones la ficción se parece a la realidad tanto como Henry Fonda a sus hermanos en la trama, Tim Hold y Ward Bond: nada.
El conflicto de intereses entre los ganaderos demócratas de los Clanton y los McLaury que controlaban Tombstone y los empresarios republicanos a los que representaban los Earp queda muy lejos de la justa detención de los asesinos de sus hermanos por parte de Wyatt. Hermanos que por cierto acabaron muriendo y quedando invalido por la venganza de los Clanton mucho después del mítico duelo en el que no participó el padre de los Clanton ni murió Doc Holliday que no era cirujano sino dentista.
Dicho todo lo cual a Ford le importa tres pimientos la Historia con mayúsculas, el solo sabe hacer como nadie películas del Oeste, y vuelve a ellas para reengancharse después de la guerra en la que ha filmado varios documentales.
El título original "My darling Clementine" refleja mucho mejor de que va la cosa, que no es de los hermanos Earp ni de Tombstone ni del tiroteo del O.K. Corral. Es del Oeste, aquí sí con mayúsculas, de sus gentes, que luchan por sobrevivir lo más civilizadamente posible en un entorno hostil, con sus hoteles, salones, diligencias (!Ah, las famosas diligencias de Ford!), barberías, iglesias, bailes..., etc, y del amor que se hace hueco entre todo ello con gentes rudas que son capaces de jugar a columpiarse en una silla, que temen sacar a bailar a una señorita mas que liarse a tiros y que creen en el orden y la ley aunque sea sui generis para prosperar como nación.
Ford lo borda y lo reborda. La cantidad de escenas y planos memorables es impagable. Los actores y actrices, incluido Mature, están a la altura aunque algunos tengan que defender escenas para la galería como la de la operación. Walter Brennan demuestra que como le des minutos te roba la película y Fonda esta inmenso en su serenidad y en esos andares que según Ford definían el cine.
Hasta Zanuck acertó ejerciendo su poder enmendando la plana a Ford añadiendo escenas que acabaron siendo míticas como la charla ante la tumba y ese final tan romántico con el Monument Valley (que en realidad está muy lejos de Tombstone) al fondo, aunque servidor prefiere el original de Ford donde la dulce Clementine brilla por su ausencia y el rudo, cazador de búfalos, tahúr, alguacil y marshall se pierde solo en el horizonte. So long. The End.
ELZIETE
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow