Esta es una de esas secuelas que tardan en darse tantos años por el hecho de que no se tiene muy claro si es una película de la que hacer una secuela. Es verdad que el motivo por el que se fuerza un seguimiento de la historia general está metido un poco con calzador, el resto de la película es muy buena, equiparable a la ópera prima dirigida por Ridley Scott, para realizar una secuela dirigida por otro clásico del cine como James Cameron. La historia como tal no es lo importante, es volver de donde se salió para evitar que cosas malas pasen, por resumirlo de alguna forma poco extensa. Todos los personajes están muy bien conseguidos, tienen su lugar en la historia en algún momento determinado. Otra de las cosas es que da igual cual sea tu nombre detrás de las pantallas o cuanto de importante eres dentro de la historia, no se sabe quien será el próximo en morir. Los efectos especiales mejoran un poco para lo que es la época, pero hay algunas cosas que vistas en HD chirrían bastante. Pocas veces se ve una secuela a la altura de la anterior película de la saga, pero en este caso podemos decir que se trata de eso. Pero como digo, a la altura, no puedo verla como superior, porque no hizo nada nuevo, si no que siguió unos parámetros ya establecidos y los mejora en cierta medida.