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7
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13.817
Thriller
En este desenlace de la saga Millennium la tensión se dispara. Tras el agónico final de La chica que soñaba con una cerilla y un bidón de gasolina, puede que Lisbeth Salander haya sobrevivido a ser enterrada viva pero sus problemas están lejos de haber acabado. Está acusada de triple asesinato y fuerzas poderosas intentan silenciarla de una vez por todas. Mientras, Michael Blomkvist escarba en su oscuro pasado y pronto encuentra sus huellas. (FILMAFFINITY) [+]
7 de marzo de 2010
10 de 13 usuarios han encontrado esta crítica útil
Conclusión final y definitiva de la saga Millennium (esta si que no se puede estirar, las novelas son las que son y Stieg Larsson no es remplazable).
La tercera parte finaliza estas adaptaciones cinematográficas de forma satisfactoria y digna... mucho más digna de lo esperado tras la mediocre segunda parte (que me quitó un pelín el interés por la resolución de las aventuras de Salander).
Pero reconozco que tenía cierta curiosidad por saber el destino final de la protagonista (confieso que no he leído las novelas, por lo que la resolución seguía siendo un misterio para mí), y el buen sabor de la primera parte no lo olvido tan facilmente. Así que esta entrega final se merecía al menos una oportunidad.
Bien, vayamos a lo importante de esta tercera parte:
Me gusta que se siga manteniendo esa atmósfera sobria y gélida tanto a nivel visual como a nivel narrativo, le da un toque muy especial a la trilogía... un toque de autenticidad, seriedad, concreción, depresión y frialdad. Muy buena la fotografía, se nota que es de bajo presupuesto pero es muy apañada. Y el uso de planos y transiciones sin ser algo destacable, no resulta desacertado. Tambien destaca el poco pero buen uso de una sombría banda sonora.
Pero la cinta tiene fallos, por supuesto que los tiene. No deja de tener algunos momentos un tanto forzados. Y no hay cambio de director respecto a la segunda, por lo que algunos de los defectos de la anterior película se mantienen inevitablemente. Los defectos "Alfredson" se notan sobre todo en el primer acto del metraje (y mucho más en sus primeros minutos que recuerdan tristemente a la convencional segunda entrega) con esa mala manía de mostrarnos escenas que pueden llegar a exhasperar, que nos describen multitud de personajes y situaciones de forma un tanto disconexa, trivial y algo desordenada con poca información explicativa (el que no se haya leído las novelas, no se enterará de la mitad durante ese periodo... y por supuesto el que no haya visto las dos primeras partes, que ni se moleste en tratar de seguir algo de la trama con un mínimo de interés o pasión). Pero... (sigue en spoilers)
La tercera parte finaliza estas adaptaciones cinematográficas de forma satisfactoria y digna... mucho más digna de lo esperado tras la mediocre segunda parte (que me quitó un pelín el interés por la resolución de las aventuras de Salander).
Pero reconozco que tenía cierta curiosidad por saber el destino final de la protagonista (confieso que no he leído las novelas, por lo que la resolución seguía siendo un misterio para mí), y el buen sabor de la primera parte no lo olvido tan facilmente. Así que esta entrega final se merecía al menos una oportunidad.
Bien, vayamos a lo importante de esta tercera parte:
Me gusta que se siga manteniendo esa atmósfera sobria y gélida tanto a nivel visual como a nivel narrativo, le da un toque muy especial a la trilogía... un toque de autenticidad, seriedad, concreción, depresión y frialdad. Muy buena la fotografía, se nota que es de bajo presupuesto pero es muy apañada. Y el uso de planos y transiciones sin ser algo destacable, no resulta desacertado. Tambien destaca el poco pero buen uso de una sombría banda sonora.
Pero la cinta tiene fallos, por supuesto que los tiene. No deja de tener algunos momentos un tanto forzados. Y no hay cambio de director respecto a la segunda, por lo que algunos de los defectos de la anterior película se mantienen inevitablemente. Los defectos "Alfredson" se notan sobre todo en el primer acto del metraje (y mucho más en sus primeros minutos que recuerdan tristemente a la convencional segunda entrega) con esa mala manía de mostrarnos escenas que pueden llegar a exhasperar, que nos describen multitud de personajes y situaciones de forma un tanto disconexa, trivial y algo desordenada con poca información explicativa (el que no se haya leído las novelas, no se enterará de la mitad durante ese periodo... y por supuesto el que no haya visto las dos primeras partes, que ni se moleste en tratar de seguir algo de la trama con un mínimo de interés o pasión). Pero... (sigue en spoilers)
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
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spoiler:
... ese defecto queda difuminado en los dos últimos tercios del metraje gracias al importante peso de los personajes y de la trama argumental, que logra tenernos expectantes ante una resolucion que promete muchísimo y que cumple con creces atando todos los cabos y terminando de dibujar a sus protagonistas.
Sí, esta vez hay una trama que evoluciona e incrementa en interés y unos personajes jugosos (por qué no decirlo, los actores están perfectos. Rapace rescata Lisbeth Salander de su involución de la segunda parte (aquí no la tenemos como una Jackie Chan versión femenina ni hace milagros para salir de la tumba... solo trata de sobrevivir emocionalmente tras todo lo que ha pasado, y es suficiente con sus silencios, sus pocas palabras y su recuperada actitud de avispada en la sombra), Myqvist mantiene a su personaje como siempre, los villanos se hacen odiosos, y el resto cumple destacando Annika Hallinn como la embarazadísima abogada de Salander).
Con Millennium, el fallecido Stieg Larsson nos muestra a base de un thriller de crímenes la cara de la sociedad que nadie quiere mostrar a un público débil y autoengañado. Esto implica villanos más realistas y detestables de lo esperado, con más poder de manipulación y más capacidad para herir emocionalmente a sus víctimas... lo que hace que deseemos a toda costa su castigo por parte de los protagonistas que son también unos antihéroes más reales (con el perdón de la segunda parte).
"Millennium 3" no tiene tanta intensidad emocional con momentos desgarradoramente impactantes como la primera, pero aquí ya se trata de investigar y resolver una gran injusticia que implica a una trama criminal corrupta que casi es el anticristo mientras los villanos ponen trabas imposibles. Cosa que finaliza con un tercer acto apoteósico en el cual recuerdo como la sala de cine no paraba de maldecir los obstáculos que debe sortear Salander, y de alegrarse con palabras en alto cuando por fin se hace justica.
Lo mejor: El juicio. El como la saga vuelve a captar el interés y el deseo de que los villanos se lleven su merecido. "Plaga" (eso sí es un héroe).
Lo peor: Su primera media hora. Ver ésta sin haber visto las dos anteriores. Un excesivo metraje que hastiará a los que no sean fanáticos de la trilogía.
Sí, esta vez hay una trama que evoluciona e incrementa en interés y unos personajes jugosos (por qué no decirlo, los actores están perfectos. Rapace rescata Lisbeth Salander de su involución de la segunda parte (aquí no la tenemos como una Jackie Chan versión femenina ni hace milagros para salir de la tumba... solo trata de sobrevivir emocionalmente tras todo lo que ha pasado, y es suficiente con sus silencios, sus pocas palabras y su recuperada actitud de avispada en la sombra), Myqvist mantiene a su personaje como siempre, los villanos se hacen odiosos, y el resto cumple destacando Annika Hallinn como la embarazadísima abogada de Salander).
Con Millennium, el fallecido Stieg Larsson nos muestra a base de un thriller de crímenes la cara de la sociedad que nadie quiere mostrar a un público débil y autoengañado. Esto implica villanos más realistas y detestables de lo esperado, con más poder de manipulación y más capacidad para herir emocionalmente a sus víctimas... lo que hace que deseemos a toda costa su castigo por parte de los protagonistas que son también unos antihéroes más reales (con el perdón de la segunda parte).
"Millennium 3" no tiene tanta intensidad emocional con momentos desgarradoramente impactantes como la primera, pero aquí ya se trata de investigar y resolver una gran injusticia que implica a una trama criminal corrupta que casi es el anticristo mientras los villanos ponen trabas imposibles. Cosa que finaliza con un tercer acto apoteósico en el cual recuerdo como la sala de cine no paraba de maldecir los obstáculos que debe sortear Salander, y de alegrarse con palabras en alto cuando por fin se hace justica.
Lo mejor: El juicio. El como la saga vuelve a captar el interés y el deseo de que los villanos se lleven su merecido. "Plaga" (eso sí es un héroe).
Lo peor: Su primera media hora. Ver ésta sin haber visto las dos anteriores. Un excesivo metraje que hastiará a los que no sean fanáticos de la trilogía.