Esta nueva versión de "Robocop" vuelve a demostrar que hay algunos remakes innecesarios y con un único fin: el recaudatorio.

Este "Robocop", si bien consigue ser entretenido y con algunos momentos resolutivos y dinámicos, no es capaz de quedarse en la memoria por mucho tiempo. Aquí, el clásico distópico, osado, luctuoso e insólito de los 80 es suavizado... hasta convertirse en un blockbuster de género policiaco y ciencia-ficción, de conspiraciones y persecuciones "cacos vs. policías" sencillotas al máximo y bastante rutinarias.

Evidentemente la cinta cuenta con unos cimientos portentosos en su temática que ya nos regalaba la original (al fin y al cabo la historia trata de la lucha de un hombre (y alguno que otro más) por recuperar un resquicio de honorabilidad ante la vorágine de un futuro tan delictivo y corrupto como maquinador. Y nos presenta a un antihéroe con una estética futurista imponente) y muy mal tendrían que desarrollarse esos cimientos para que el metraje acabara en un absoluto desastre. Y, a pesar de que el desarrollo en el libreto de esta versión no sea capaz de aportar la asombrosa brutalidad y saña depravada (estamos ante un reboot "para todos los públicos") del mundo que nos dio Verhoeven (y como consecuencia no sea capaz de transmitir la misma cólera en el espectador de que las cosas cambien en ese universo), la exposición y la evolución del guión no es un absoluto desastre (aunque los personajes y sus momentos no estén muy trabajados y sean bastante unidimensionales, planos y previsibles... al contrario que la sorprendente original de los 80). La cinta al menos no deja puntos muertos en su libreto y progresa con dinamismo, consiguiendo ser un digno pasatiempo.

Padilha por su parte demuestra solvencia aportando una cadencia bastante ágil en la hora y media de metraje (con una presentación de personajes llevadera, y un nudo y resolución de compás entusiasta).

Las interpretaciones tampoco desentonan (aunque Joel Kinnaman resulta correcto y no chirría en su personaje... tampoco tiene un carisma abrumador ni destaca enormemente como lo hizo Peter Weller), sobresalen el veterano Samuel L. Jackson (esta vez con un personaje paródico) que nunca molesta, un entusiasta Michael Keaton, y sobre todo un natural y a la vez dramático Gary Oldman que mejora la cinta cada vez que aparece en pantalla con su garra (el actor saca oro de un personaje tipicón en el libreto y se convierte en el punto fuerte de la cinta).

La película además (y como era de esperar) cuenta con unos efectos especiales que se lucen de lo lindo en ciertas escenas de acción (que resultan los mejores momentos del metraje junto con la apariciones de Oldman). Las secuencias en las que este Robocop se pone "manos a la obra" exhiben espectaculares escenarios y diseños futuristas de acción tecnológica, con un gran sonido, una estupenda inserción de la banda sonora, un montaje entusiasta y unos diseños digitales que son todo un gancho en esos puntos del metraje.

Aun así, este "Robocop" es demasiado simple, blandujo y dócil en su guión como para resultar memorable y sobresaliente. No estamos ante un "Caballero Oscuro" ni mucho menos, pero al menos habrá que agradecer que sea más llevadera y distraída que otros recientes "remakes" (que acabaron siendo exasperantes y cargantes).

Eso si: para para ver un thriller futurista icónico, con una atmósfera sombría memorable, con un arrojo en su guión asombroso, con una construcción de personajes excelente, con una crueldad y vileza sorprendentes y con una distopía potentísima... pare eso siempre queda el original de Verhoeven.

Lo mejor: Gary Oldman (el actor aporta gran clase y calidad al metraje en todos sus momentos). Los efectos visuales y el montaje de sus escenas de "acción trooper". Que, para ser un remake logra ser un pasatiempo de evasión tolerable.

Lo peor: Al guión le falta mucho más ingenio, trabajo y profundidad (y eso de quitar muchos puntos fuertes de la cinta en la que se basa... malo...