Un pintor sin inspiración es un alma en pena, alguien atormentado que puede sufrir las penurias materiales de carencia de alimentos o de un techo para cobijarse pero que jamás se conformará con no poder pintar lo que desearía.

William Dieterle dirigió acertadamente esta película inmaterial, alejada de lo común pues expresa la desesperación de un hombre perdido sin inspiración y sin amor.

Pese a todo su deseo es tan fuerte que le permite dar forma a su mejor lienza y llenar de amor su corazón, la modelo y sus propios sueños son los mejores útiles para plasmar su mejor obra.