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España España · madrid
Voto de tiznao:
7
Drama. Cine negro Charles Castle, un actor de Hollywood muy exigente consigo mismo, no está satisfecho de sus últimas interpretaciones. Por eso, cuando un productor le hace una tentadora oferta que él considera que dañaría su reputación, la rechaza. Pero el productor lo chantajea, amenazándolo con revelar hechos de su pasado que empañarían más su prestigio que el papel que le ha ofrecido. (FILMAFFINITY)
5 de junio de 2009
10 de 15 usuarios han encontrado esta crítica útil
Interesante historia surgida de la pluma del reputado dramaturgo y autor de teatro social estadounidense en la época post “crack del 29”, Clifford Odets, en la que se nos cuenta la historia de Charlie Casttle (Jack Palance), un actor con un acervado espíritu idealista, el cual esta profundamente enamorado de su esposa (Ida Lupino) y comparte con ella la necesidad de no renovar el contrato que le tenía atado a los estudios de Hoff (Rod Steiger) y sus producciones comerciales y mudarse a Nueva York para interpretar papeles con más enjundia, estando dispuesto si es necesario a abandonar la interpretación antes que seguir ligado a un modo de vida que le asfixia y le hace profundamente infeliz.
A partir de aquí y con la firme negativa por parte del ducho en prácticas mafiosas capitoste del estudio a perder a su rentable estrella y las infames y perturbadoras maniobras que emplea para que esto no suceda, el mundo de Charlie comienza a desmoronarse, primero al ser abandonado por su mujer al ver esta que tras una reunión con Hoff en la que se suponía iba a despedirse de él, acaba renovando el contrato por 7 años y luego al venírsele encima turbios hechos del pasado y una asfixiante presión por parte de prácticamente todo su entorno: una reportera tipo Hedda Hopper, una lenguaraz y simplona aspirante a actriz (Shelley Winters) que conoce y airea secretos de su pasado, la esposa de su mejor amigo acosándole sexualmente y su mujer en brazos de un escritor que está enamorado de ella, sin olvidar la perenne y tenaz espada de Damocles del despechado jefe de los estudios.
Sobria y eficaz puesta en escena cuasi teatral del genial todoterreno Robert Aldrich y excelentes interpretaciones por parte de todo el elenco actoral (especialmente un Jack Palance aquí alejado de sus papeles de tipo duro que sorprende por los matices con los que dota a a su personaje y Rod Steiger como el sádico, ladino y cobarde director de los estudios), hacen que las casi dos horas de metraje te mantengan atrapado esperando el cada vez más intrincado desenlace de la trama.
Recomendable
tiznao
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