Estas películas, la verdad que me entretienen mucho y me hacen pasar un buen rato pero ya no me sorprenden para nada, ni me aportan nada nuevo porque todas tienen el mismo esquema y guión.

Cuando apareció Toy Story en los años noventa fue todo un éxito y todo un logro pero desde entonces no han hecho más que aparecer cientos de películas de animación por ordenador que son todas iguales.

Personalizan animales, objetos, coches...tienen el mismo fin para mayores y para jóvenes, los mismos personajes, el bueno, el malo y una serie de sentimientos fáciles para provocar la lágrima fácil y una serie de crítica social, en este caso la comida rápida y el derroche de los alimentos son el tema principal, un toque ecológico salva el guión.

Entretenida pero nada nuevo, al contrario, fácil y poco original, pero divierte.