Se dijo hasta la saciedad: Abajo el amor pretendía ser una repetición de los esquemas de las típicas comedias románticas de Doris Day y Rock Hudson.
Quien esto escribe confiesa que no ha visto ninguna de estas comedias con tan célebre pareja del Hollywood clásico, así que no sé si la imitación es buena o mala. Lo que sí se puede decir es que es una comedia agradable, afable, tan entretenida como intrascendente. Y ahí reside su mayor problema. No deja huella, no aporta nada nuevo, y se olvida según comienzan los títulos de crédito. También se le podría criticar su sobredosis de azúcar, pero bueno, esto era esperable y la película no engaña a nadie en ese sentido.
Además, pone Peyton Reed frente a la pantalla a Renée Zellweger y Ewan McGregor, dos excelentes intérpretes que, además, tienen mucha y buena química en pantalla. Es gracias a ellos que dos personajes bastante irritantes a ratos como Barbara y Catcher terminan por resultar al menos algo interesantes para el espectador. Años después, repetirían como pareja en la superior Miss Potter.
Intrascendente comedia, pero pasable.

Lo mejor: Zellweger y McGregor, una pareja con química.
Lo peor: Se olvida nada más terminar.