Haz click aquí para copiar la URL
España España · almeria
Voto de TOM REGAN:
6
Ciencia ficción. Drama Tiene lugar en un 1969 alternativo, donde dos hombres, en una peligrosa misión de alta tecnología, lidian con las consecuencias de una tragedia inimaginable.

Episodio de la Temporada 6 de Black Mirror, estreno en junio de 2023 (Netflix)
21 de junio de 2023
66 de 88 usuarios han encontrado esta crítica útil
176/28(20/06/23) Sugerente, aunque con muchas lagunas tercer episodio de la sexta temporada de la serie tv de culto creada por Charlie Brooker (guioniza todos los capítulos), antología de episodios autoconclusivos, con historias y personajes diferentes, versando sobre los peligros que acarrean las nuevas tecnologías. Dirige John Crowley (“Brooklyn” o “True Detective”), con ritmo sereno, incluso demasiado, para la entrega de más duración de la temporada, 80 minutos, excesiva, dándome sensación el creador ha querido potenciar la profundidad con más minutaje, y lo que ha conseguido es sensación de estiramiento artificioso, reflejado en situaciones se reiteran y alargan sin sentido orgánico. Brooker vuelve a uno de sus mantras (se le han agotado ideas originales?), como es los robots con personalidad.

Tiene sus pilares de atractivo en el planteamiento de historia de inicio, desconcierta al espectador, relato intrigante, bien llevado, pero a cada giro puedes sentir los engranajes de lo impostado crujir, un triángulo romántico telegrafiado, sabes por qué derroteros girará, se hace entretenidilla, aunque por momentos lánguida, te atrapa en querer saber que pasará en el twist de costumbre de la serie.

Estudio del dolor al límite, sobre la soledad, el compañerismo, la traición soterrada, el machismo más abyecto, en realidad es más un thriller funcional, que esos argumentos de la serie que te hacen sentirte cerca de esa tecnología abordan como potencialmente alienante, abordar que tu mente puede ser trasladada a robots no es algo me cree cercanía alguna, espero de Brooker me involucre en este micro mundo tecnológico y aquí no lo hace. Capítulo con claras influencias en “Blade Runner”, “2001” y en el caso famoso de los asesinatos de Charles Manson (curiosamente él nunca estuvo presente, Charles Manson transmutado en Kappa, al que da vida un buen y amenazante Rory Culkin) a Sharon tate (embarazada) y compañía en 1969. Posee un final retorcido, agrio, pesimista, y esto es de agradecer, nada acomodaticio y sí me sorprende, pensaba iría por otro lado, aunque los agujeros son más grandes que los del Titanic.

Tiene un trio protagonista muy bueno, como la promesa de estrella hollywoodiense que se ha quedado por el camino, Josh Harnett (ha trabajado con directores como Michael Bay, Brian de Palma o Ridley Scott), da vida a un personaje cargado de ambigüedad, tierno en el inicio con su familia, demostrando sutilmente su romanticismo, sibilino en su comportamiento, con atractivo melancólico, y con transformación bien llevada en su expresividad mesurada; una estupenda Kate Mara (otra que ha trabajado con grandes realizadores como Danny Boyle, Ang Lee o Ridley Scott), da vida a una mujer nostálgica de lo que puede rozar pero no tener, enternecedora, consigue empaticemos con su comprensión, y posteriormente con su razonable rabia; y sobre todo con un gran Aaron Paul (eterno Jesse Pinkman de “Breaking Bad”), papel que tiene tres caracterizaciones, la del astronauta en relación con su ‘compañero’ de misión, de principio con profesionalidad, luego empatía con el dolor de su colega, luego con dudas, y finalmente la ira. También con el rol de esposo disfuncional, distante, solo parece querer oler el ambiente, no termina comprometiéndose. Finalmente sirviendo de funda para su compañero, sabiendo captar con matices la personalidad de este, sensacional.

Tiene inicio intrigante muy bucólico. En una casa de California, David (Josh Hartnett) tiene una esposa radiante y dos adorables hijitos a los que pinta el padre sentados en el sofá. En otro entorno más rural, Cliff (Aaron Paul) supervisa una humilde granja con su esposa (Kate Mara) y su hijo pequeño. David va con esposa al cine y allí la gente hace comentarios sobre él, y notamos algo no es normal . Cliff es tipo hogareño, pero frio en la relación con su esposa, lo contrario que David, lo vemos bailar dulcemente con su esposa, a la que finalmente acaricia muy sensualmente. Cuando nos enteramos que estos hombres están en viaje interestelar en misión de seis años, y lo que vemos en la Tierra son sus réplicas a las que viajan sus mentes cada cierto tiempo para combatir la soledad y poder estar con sus familias, combatiendo la alienación espacial.

La historia parece se establece en USA en 1969, y me resulta algo gratuito, en ese año el hombre viajó a la luna, no tenía tecnología para viajes más allá de este asteroide, no la tiene siquiera hoy día, entonces porque establecer este año. Tendría más sentido fuera en un futuro, aunque fuera cercano, pues se entendería lo de las réplicas, esto me hace torcer el gesto. A lo mejor se hizo para que la masacre ‘mansonniana’ fuera más creíble, pero esto podría haberse entendido también en el futuro, no entiendo este desvío de lo importante sin sentido.

Al relato le cuesta arrancar, se nota que le sobra minutaje, con menos tiempo habría subido en solidez narrativa. La historia al final, un a vez despojado del existencialismo referente a las réplicas, se queda en un triángulo amoroso, con celos y venganzas, pues en realidad lo de los robots es un McGuffin, pues podría haber sido otra réplica con otro rostro, podría haber tenido sentido si al hijito de Cliff se le hubiera dado alguna interacción con su supuesto padre, pero esto que se apunta termina abandonándose.

Parece que las réplicas no pueden tener relaciones sexuales, no vemos tengan ninguno de los dos. Pero no sabemos si es por ética moral o porque estos robots no están preparados de algún modo para ello, esto es una nebulosa en la que no se entra. Esto no se aborda, se deja caer, pero no se entra en como las pulsiones sexuales pueden ser caldo de cultivo de testosterona latente a punto de estallar, tendría su sustancia, pero no!… El episodio se atiene a analizar el amor puro de sentimientos, sin implicaciones sexuales, y esto me resulta bastante cojo, pues me viene a decir que estos astronautas van a estar seis años sin sexo alguno!... (sigo en spoiler)
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
TOM REGAN
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow