Si bien el New French Extremity ha dado películas a conocer que se hicieron un hueco en el cine de género, como es el caso de títulos como Al Interior (Alexandre Bustillo y Julien Maury, 2007), o Alta Tensión (Alexandre Aja, 2003), la que nos ocupa mantiene el honor de ser la película más extrema de esta vertiente. La película está dirigida por el responsable de títulos como Ghostland (2018), del cual es su segunda película, y está protagonizada por Mylène Jampanoï (Madame Claude, 2021), y Morjana Alaoui (Fuerzas Especiales, 2011).

En Francia, a comienzos de 1970, Lucie, una niña desaparecida un año antes, es vista mientras camina por una carretera. Se encuentra en estado catatónico y es incapaz de contar nada de lo que le ha sucedido.(FilmAffinity)

Si bien en Martyrs, hay mucha violencia, presentada de forma explícita, y aparentemente gratuita, además de presenciar una tortura psicológica que resulta aún peor, en este caso el director la utiliza contra el espectador, para darle una auténtica lección en los últimos minutos del metraje. Más allá de lo evidente, la película cuenta con un guión cargado de giros y trampas, que, junto el tono tenso y desagradable de la cinta, causa en el espectador una mezcla de agotamiento e interés que resulta francamente brillante, a lo que se suman unas interpretaciones de las dos protagonistas más que notables, que agudizan está sensación. La dirección de Laugier, cumple su función, asustando cuando lo pretende, y causando en el espectador una creciente sensación de rechazo de forma más que intencionada.

Martyrs es una película que, evidentemente es demasiado extrema para el público generalista, pero que, para todo el que se atreva y tenga cierto estómago, encontrará una excelente película de terror, con un muy buen guión escrito por el propio Laugier, que presenta una trama que seguro no te va a dejar indiferente.

Nota personal 8/10