Haz click aquí para copiar la URL
Voto de charcosombrio:
9
Drama Basada en las memorias escritas por Philippe Petit (Joseph Gordon-Levitt), un funambulista francés que, en 1974, guiado por su mentor Papa Rudy (Ben Kingsley), se propuso un reto nunca antes realizado: recorrer sobre un cable el espacio que separaba las Torres Gemelas de Nueva York. (FILMAFFINITY)
10 de octubre de 2015
22 de 25 usuarios han encontrado esta crítica útil
Después de varios tropezones cinematográficos en los cuales el buen Zemeckis lo apostaba todo por las innovaciones técnicas y la tercera dimensión, por fin regresa triunfante con una película que le permite tener un perfecto equilibrio entre el atractivo audiovisual y una historia interesante con mucho corazón.

Con el uso de la voz en off y a manera de cuento, el director desarrolla la historia de vida de Phillippe Petit, un hombre que desde niño ha sentido una fascinación por el equilibrismo en la cuerda y que ya en la edad adulta, tras conocer las todavía no terminadas torres gemelas en Nueva York, decide que su sueño es cruzarlas, a través de un cable y a una altura de más 110 pisos.

El estilo de Zemeckis siempre se ha caracterizado por su tono rosa u optimista plagado de sentimentalismo, y este filme no es la excepción. Inicia contando anécdotas claves para la evolución del protagonista, siempre cuidando el humor, el drama y el papel que jugarán los personajes secundarios.

Durante el segundo acto, con gran pulso narrativo y suspenso, la audiencia se involucra en la película mientras el plan para entrar a las torres va cobrando forma. Sin embargo es durante el fascinante tercer acto, la culminación del viaje, la realización del sueño de Phillippe, cuando la película alcanza grandes alturas literal y figurativamente.

La cuidada fotografía que durante todo el metraje se encarga de concebir planos audaces que funcionan de forma hermosa en tercera dimensión, llega a un verdadero clímax cinematográfico como no se había visto en las salas durante este año.

Una experiencia que literalmente quita el aliento, no solamente por lo atrapante de su historia, sino por su correcta realización, el carisma de Gordon Levitt y su creatividad visual que demuestra que la tercera dimensión es un recurso que, usado con inteligencia, puede llevar más allá la experiencia de ver una película en el cine.
charcosombrio
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow