Si los directores, actores, productores, músicos, etc, etc, etc, que componen el cartel de esta película no son capaces de alimentarse tres veces al día sóla y exclusivamente de la fama, mal vamos, porque pagarles, lo que se dice pagarles...
Yo creía que era una peli de terror... terror psicológico, de ese que desgasta, aburre, adormece al espectador y que, incluso, le invita a reirse de sí mismo cuando, por sorpresa, se descubre a sí mismo viendo este "film" cuando podría estar haciendo cualquier otra cosa, incluso fregar los platos.

Insufrible.
Coman fama.