Al diablo con la crítica, al diablo con el box office. Acabo de ver una maravilla de película. Solo el tiempo le dará el lugar que se merece.
Mi experiencia fue similar a la de otro lector de esta página. Gente dormida en la sala, otros bostezando, la inmensa mayoría con cara de no entender ni mierda de lo que estaba pasando. No tenían el mas mínimo interés de hilar las historias y muchos desprevenidos solo advirtieron que Tom Hanks o Hugo Weaving (grande entre los grandes, por cierto) aparecían en diferentes roles pasada ya la mitad del metraje. Creo que esta pereza mental colectiva es culpa de la pobreza del cine al que Hollywood nos tiene acostumbrados. Al grueso de los espectadores les gusta todo masticado, hecho papilla, listo para digerir.
¡Me ha parecido maravillosa! Me ha emocionado hasta el límite (me recuerda a aquel sentimiento que me invadió cuando vi por primera vez V de Venganza). Que un par de historias no se conectan lo suficiente, que tanto maquillaje despista, que es complicada de seguir, que Halle Berry se ve horrenda en todas sus apariciones (digo yo, ¿no?)... No presten atención a estas opiniones atrevidas y perezosas y denle una oportunidad. Duerman bien el día anterior y vayan preparados para ver tres horas de un espectáculo majestuoso, donde la música, los personajes, la trama y las dudas sin resolver les invitará a un segundo y seguramente placentero visionado.