Haz click aquí para copiar la URL
España España · Barcelona
Voto de Rómulo:
8
Comedia Jimmy está desempleado, divorciado y no tiene un duro, Clyde perdió un brazo en la guerra de Irak y ahora trabaja de camarero en un antro, y Mellie es una peluquera obsesionada con los coches, los tres son hermanos y están empeñados en burlar una supuesta maldición familiar. Para ello van a robar la cámara acorazada del circuito de carreras Charlotte Motor Speedway, durante la celebración de la carrera Coca-Cola 600 en Carolina del ... [+]
31 de marzo de 2018
Sé el primero en valorar esta crítica
La suerte de los Logan (Logan Lucky)

¿Quién no ha visto alguna vez una película o serie del estadounidense Steven Soderbergh? Verán, este hombre conoce el oficio como pocos y sus realizaciones llevan impresas una muy particular manera de entender el cine, lo que le hace diferente y especialmente reconocible. Es director, productor y editor de cine, televisión y fotografía, guionista y actor. Como carta de presentación no está nada mal ¿no creen? Y entre muchos otros importantísimos premios y reconocimientos conviene destacar que, en su ópera prima "Sexo, mentiras y cintas de vídeo", ya ganó la Palma de Oro en Cannes en la edición de 1989 y en el año 2000 el Óscar por "Traffic", ambos galardones a la mejor película.
Pues bien, su último trabajo, "La suerte de los Logan", supone también una gran suerte para todos aquellos que amamos el buen cine sin distinción de géneros. Primero porque el guion es muy original, sumamente divertido, no chirría ni desfallece en ningún instante, los diálogos son desternillantes, destilan veneno en estado puro y no están exentos de una buena dosis de crítica inteligente y mordaz que apunta directamene al corazón del sistema norteamericano, en donde las corruptelas son moneda de uso corriente en muchas de sus instituciones y actividades de todo tipo ya sean públicas o privadas. Y después, porque posee esa saludable brisa de cine clásico que tanto le gusta a Soderbergh, cuya fotografía me recuerda los colores vivos y luminosos de las películas de mi infancia. Apoyada en un guion sencillo pero muy eficaz, maravillosamente trazado, va directo al grano, no se entretiene buscándole tres pies al gato, con el único objetivo de contar una historia liberada de todo artificio que distraiga la atención de espectador.
Buena parte del éxito de esta brillante farsa recae sobre Daniel Craig, actor británico que saltó a la fama como el último James Bond, demuestra aquí sus dotes de extraordinario interpretando a Joe Ban, un atracador pirado especialista en explosivos que cumple condena en una cárcel de la América profunda en Virginia Occidental. Junto con él, Chanin Tatum y Adam Driver como los hermanos Jimmy y Claide Logan, un par de fracasados sin otro futuro que no sea el de ir tirando, herederos de un pasado familiar tan deprimente como desgraciado, con fama de gafes en todo el condado y de los que no se fiaría ni un escolar del colegio de san Ildefonso, pergeñan uno de los golpes más estrambóticos y rocambolescos que yo recuerde, con tantas posibilidades de éxito como las de un paralítico en la final olímpica de los 100 m lisos. El resto de los actores que forman parte de esta santa cofradía de la buena estrella están perfectamente esbozados y completan una de las bandas más incompetentes en toda la historia de la Unión Americana.
Y si ustedes, mis improbable lectores, desean pasar un buen rato y les pica la curiosidad por saber en qué termina la temeraria aventura de esta explosiva pandilla de histriónicos descerebrados, tendrán que ir a verlos. Estoy convencido de que no se arrepentirán porque "La suerte de los Logan" en una deliciosa, irreverente y desmadrada comedia que deberíamos apuntar, una vez más y para nuestra fortuna, en el haber de este genial cineasta que es Soderbergh.

Emilio Castelló Barreneche
Rómulo
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow