Tree es una universitaria que trata fatal a todos los que la rodean, registro que borda Jessica Rothe.
En el día de su cumpleaños es asesinada, pero ese mismo día entra en bucle y vuelve a repetirse una y otra vez cada vez que muere, dándole la oportunidad de intentar salvar su vida.

Es una mezcla entre Atrapado en el tiempo (Groundhog Day) y un slasher cómo Halloween de John Carpenter pero con un asesino con careta de bebé
.
Y sin ser una buena película, ni emular en calidad a sus referentes, sino más bien haciendo un homenaje, tiene ciertos momentos de tensión y de diversión que la hacen bastante entretenida de ver.

Poco a poco, Tree va madurando en su interior y pasa de la zorra del primer día a alguien con buen fondo.
Y aunque en Atrapado en el tiempo el mensaje se transmitía en el subtexto y con una sutileza en la que se decía sin necesidad de decirlo, y aquí es más bien obvio y algo burdo, sigue siendo que nunca es muy tarde para cambiar, que se puede intentar ser mejor para poder estar mejor y que hay que vivir el presente del mejor modo posible para mejorar el mañana.