Película curiosa y interesante, hija de su época en plena contracultura hippy, también con ese tono experimental que tiene, un erotismo desenfrenado en el que abundan los desnudos femeninos, algo no tan frecuente en esa época. Con tres directores a los mandos, supongo que cada uno dejaría su sello personal, sobre todo el ínclito Roger Corman, un director de fuerte personalidad, digan lo que digan sus detractores. Con un pequeño prologo y mediante una obra teatral al estilo del marques, asistimos a los principales episodios de su vida , como su obligado casamiento, sus escandalosas obras, literarias y teatrales y su desenfrenado libertinaje, o la complicada relación con su suegra, pero por otro lado su enamoramiento imposible con Senta Berger ( bellísima por cierto), un Keir Dullea convincente como el divino marques, con un marcado aire decadente y también un insuperable Jhon Huston como el tío eclesiástico, más golfo y libertino que el mismo marques ( ya lo dice el refrán, unos crían la fama y otros cardan la lana ), visualmente esta muy lograda, las luces, las sombras los ambientes y encima un guionista de lujo como el escritor Richard Matheson, un film poco recordado, pero interesante al fin de al cabo.