No es que no me guste el anime o el manga, pero el ritmo general de Mononoke, Chillido y demás se me hace lento, muy lento, demasiado lento y los vínculos entre otras sagas o títulos míticos me resultan desconocidos para alguien, como yo, con acceso limitado a los productos de ese mundo y tiempo aún más limitado para tratar de desentrañar las relaciones entre ellos. Vamos, que no es la primera vez que abandono una película por la mitad de la que no estoy entendiendo ni jota y luego me entero que es la segunda o tercera entrega de una franquicia. O que da por hecho que, puesto que se desarrolla en el mismo universo de tal otra obra, se puede ahorrar el contexto o asumir que los personajes son conocidos.

Con las valoraciones me pasa lo mismo, cuando consigo acabar una de estas películas siento que tiendo a una infravaloración que no se merece, porque intuyo que esa coherencia que he echado de menos no es un problema argumental o narrativo, sino que procede de falta de lore, de no haber tenido acceso a tal o cual cómic o a tal o cual corto. Pero siempre me pasa lo mismo, que me da la impresión de que he empezado la peli por la mitad o de que se ha cortado a cinco minutos del final y, claro, por muy sugerentes que hayan sido los personajes o espectaculares que hayan sido las batallas, la nota se resiente.

“Appleseed: Alpha” es la más autocontenida (o de las más autocontenidas) que recuerdo: casi se puede deducir el pasado de los protagonistas con sus elipsis y sus discursos y, más que un final, se echa de menos una segunda parte. En todo caso, de hasta un profano como yo fue capaz de entenderla, es que cualquiera puede y, esto sí que es indiscutible, la película es emotiva como sólo los japoneses saben serlo, trepidante y entretenida. Toques de western, de postapocalipsis y romance, de la manera que por aquella parte del mundo se entiende el amor: como una mezcla de sacrificio y devoción. Personajes con los que empatizas corriendo aventuras inteligentes llenas de acción y ternura en un mundo fascinante. Sí, así hasta yo me apunto.