Un grandioso Renoir realizó una exhibición que queda para la historia y para nosotros, los privilegiados que sabemos disfrutarla nada menos que setenta años después. Qué grande es mirar atrás para encontrar maravillas así, y nada menos que en una época de entreguerras tan ruidosa y complicada, haciendo señales antibelicistas tan oportunas y mostrando unos valores imperecederos. Es una pena que el tiempo pase y que ya no se hagan cosas así, respondo así con admiración positiva ante la reiterativa duda de la posible caducidad de cierto cine. "La gran ilusión" pasa de mi lista de recomendaciones pendientes de ver a la lista de recomendaciones al resto de usuarios.

Me encanta la educación y el respeto entre enemigos, hasta al pobre jefe alemán le sabe mal participar de esas situaciones. Celebro que la dirección de la comedia sea la justa y comedida (nada que ver con Wilder en algún título suyo discutible) y que el sabor agrio se presente tal como es, como una intención sana de que todo sea diferente, de que esas ganas de que que acabe todo no sea ilusión quizás y se convierta en realidad. No sé, quizás se lo deberíamos preguntar a esos guardas fronterizos que ven alejarse a los fugitivos, quizás a la madre suiza, o a tantos y tantos personajes que tienen en la cabeza lo mismo que yo, que las cosas debieran ser de otra manera. Y todo esto a dos años de la gran tragedia del siglo, qué oportuno Renoir, qué grande, enorme!!!!