Soy aficionado al cine de Fesser, especialmente por su cuidado aspecto visual, por su imaginación y (hasta ahora) por su sentido del humor. Por eso cuando vi el trailer de esta peli, mucho más dramática, no las tenía todas conmigo ante este cambio de tono, pero confiaba en el director y esperaba una muy buena película. Finalmente no la vi en el cine por temor a una excesiva dureza en sus imágenes. Ahora que la he visto creo que no me hubiera impresionado mucho, más allá de las muy desagradables escenas de hospital. Por lo demás ni la introducción de las coloristas o tenebrosas escenas oníricas (a veces un tanto ñoñas o fuera de lugar) logra que la película tenga fuerza. Su ritmo es lento y machacón, en torno a la tesis del director, y los personajes son planos y repetitivos. La actuación de Nerea Camacho no me parece muy allá, sobresaliente es, sin embargo, la de Carmen Elías. Un personaje que a pesar de las terribles frases que pronuncia me ha parecido creíble y no tan "ogro" como esperaba. En realidad y a pesar de todo sí que transmite algo de preocupación por su hija...alguien me dirá que no, pero quizá es que esperaba que el filme fuera aún más maniqueo.

No me caen nada bien los de esta secta del Opus Dei pero espero cierta credibilidad a la hora de tratar el tema. A pesar lo dicho el filme sí es algo maniqueo, o más bien machacón, en sus teorías. Pero lo más molesto es lo manipulador que llega a ser a la hora de buscar la lágrima del espectador.

Técnicamente la película está bien realizada, algunos de los actores son buenos, la idea de partida puede ser interesante y algunas de las analogías usadas tienen cierta gracia por momentos (el rollo "Cenicienta" en ocasiones es fallido y en otras tiene su gracia). También me agradan algunos personajes criticados por estereotípicos, como la amiga "cotilla" de la niña...creo que actúa de forma bastante natural y ahí se ve un poco el humor de Fesser. En cambio la niña pija-mala no me resulta un personaje demasiado necesario.

La hermana de Camino me parece que ofrece una actuación mejor que la de la protagonista (es normal, porque es más mayor) y su personaje es un poco más interesante. Con Camino creo que no está muy bien tratado el tema, en ocasiones parece que sí está influida por la doctrina de su madre, en otras, que todo se debe a una confusión entre Jesús (Cristo) y Jesús, el niño que le gusta.

Le doy un cinco por esos detalles buenos que comentaba y porque Fesser me cae bien, pero la próxima vez hazme otra comedia sin pretensiones, macho. O si quieres haz un drama, pero que sea más ligero. Quizá sea raro, pero me emocionan más algunos instantes de El milagro de P. Tinto. Son más sinceros.