Haz click aquí para copiar la URL
Voto de Pedro_MG:
5
Thriller Johnny el guapo (Mickey Rourke) es conocido por este nombre debido a la terrible deformación de su cara. Está en prisión, donde paga por un robo en el que sus cómplices lo dejaron tirado asesinando, además, a su mejor amigo. La policía le propone salir, a cambio del nombre de los criminales, pero Johnny se resiste. Tiene su propio código moral y, además, sería un blanco inconfundible por su aspecto. Un cirujano plástico le ofrece la ... [+]
19 de julio de 2019
2 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
Johnny, apodado irónicamente "El guapo" por la deformidad de su cara, es un ladrón que acaba mal tras un último golpe, al verse traicionado por algunos de sus compañeros de tarea. A partir de aquí, y gracias a un cirujano convencido de la reinserción de los delincuentes, al protagonista se le brinda la oportunidad de corregir las deformidades de su cara, que le afectan tanto en la respiración como en la forma de hablar. Su nuevo rostro podría ser la primera piedra de cara a un futuro honrado y estable, donde incluso haya lugar para el amor. Pero los planes de Johnny son muy distintos...

He seguido la filmografía de Walter Hill ya que soy aficionado a este cine áspero, con personajes poco respetables, historias oscuras y acción cruda y muy violenta. Sin embargo, esta "Johnny el guapo" se queda a medio gas. La historia se desarrolla de una manera excesivamente convencional, desaprovechando por completo un reparto bastante bueno e ideal para esta clase de roles. Mientras uno ve la película no siente que ningún personaje, especialmente el protagonista, evolucione ni se plantee dilemas ante su situación, donde tiene que elegir entre la venganza o la redención y construcción de un nuevo futuro.

Lo interesante de la historia reside en cómo una persona podría redimirse y adaptarse a la sociedad. El nuevo rostro de Johnny, finalmente, no es más que una máscara bonita sobre alguien a quien le resulta prácticamente imposible pensar en el futuro sin desprenderse de un turbio pasado. Desgraciadamente, esta idea no se desarrolla con demasiado interés.

Destacaría los papeles de Ellen Barkin y Morgan Freeman, siendo este último un poli bastante cínico y de vuelta de todo, mostrando un carácter poco habitual en posteriores papeles de este actor.

Tampoco puede dejarse de lado mencionar la ironía surgida con el aspecto de Mickey Rourke. Años después, su rostro en la vida real poco se aleja del visto al comienzo de esta cinta.

Resumiendo, estamos ante una película muy del montón que puede decepcionar a quien espere determinadas características citadas unos párrafos atrás. Una pena.
Pedro_MG
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow