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Voto de Miquel:
8
12 de septiembre de 2009
44 de 46 usuarios han encontrado esta crítica útil
Tercer y último film de Mitchell Leisen (1899-1972) realizado con la colaboración como guionistas de Billy Wilder y Charles Brackett. Adapta la novela “Hold Back The Dawn” (1940), de Ketti Frings (1909-1981), inspirada en hechos reales y referencias autobiográficas. Se rueda en escenarios naturales de Paramount Ranch (CA), L.A., Hollywood, Tijuana (Méjico) y en los platós de Paramount Studios (Hollywood). Es nominado a 6 Oscar. Producido por Arthur Hornblow Jr. para Paramount, se proyecta por primera vez en público el 11-IX-1941 (NYC, preestreno).
La acción dramática tiene lugar en Tijuana y alrededores, a lo largo de algo más de 5 meses, entre 1940 y 1941, antes de la incorporación de EEUU a la IIGM (diciembre 1941). El bailarín y gigoló rumano George Iscovescu (Boyer), que se mueve por Francia (Paris, Biarritz, Costa Azul...) e Italia (La Riviera, el Lido...). Frecuenta ambientes de las clases adineradas. A causa de la invasión nazi de Francia (10-V-1940) se encuentra con poco trabajo, por lo que emigra a EEUU. Para gestionar el visado de entrada en el país se acomoda en la pequeña localidad fronteriza de Tijuana (Méjico), donde se encuentra con su antigua pareja de baile, Anita Dixon (Goddard), que ya dispone de visado. Iscovescu es elegante, distinguido, se comporta como un galán europeo y sabe ganarse la confianza de las damas. El inspector de inmigración de la oficina norteamericana en Tijuana es el rígido, aunque de fondo humano, Sr. Hammok (Abel). El papel protagonista corresponde a Emmy Brown (Havilland), maestra en la pequeña ciudad de Azusa (L.A.).
El film suma drama, romance y crítica social. Destaca la solidez y la gracia de un magnífico guión, que aúna vigor dramático y abundantes lances de humor. Éstos se presentan en trazos rápidos y en momentos inesperados. Se sirven de expresiones ocurrentes, situaciones chocantes, reacciones extravagantes y dosis medidas de ironía, sarcasmo, burla, humor negro y crítica. La colaboración de los dos guionistas con Leisen concluye con este film a raíz de la supresión por el realizador de una escena tragicómica en la que Iscovescu daba muerte a una cucaracha “por querer entrar en EEUU sin visado”.
Es útil y rica en detalles la descripción del ambiente de saturación, miseria y desesperación de la colonia europea instalada en la frontera a la espera de una autorización que puede tardar 5, 8 o más años. También es antológica la descripción sucinta, pero eficaz, de la variedad de nacionalidades presentes, entre ellas la de una familia austriaca, los Kurtz, recordatorio de la situación que en Tijuana había vivido (1934) durante un tiempo el propio Billy Wilder.
No faltan las demostraciones de la afición de Billy Wilder a los coches, en especial los deportivos, las autovías modernas de 4 carriles, las persecuciones de coches y motos, los paseos en coche por el campo, las perspectivas de vías de intenso tráfico rodado, la pequeña ranchera que da cabida a una cantidad inverosímil de chavales.
La acción dramática tiene lugar en Tijuana y alrededores, a lo largo de algo más de 5 meses, entre 1940 y 1941, antes de la incorporación de EEUU a la IIGM (diciembre 1941). El bailarín y gigoló rumano George Iscovescu (Boyer), que se mueve por Francia (Paris, Biarritz, Costa Azul...) e Italia (La Riviera, el Lido...). Frecuenta ambientes de las clases adineradas. A causa de la invasión nazi de Francia (10-V-1940) se encuentra con poco trabajo, por lo que emigra a EEUU. Para gestionar el visado de entrada en el país se acomoda en la pequeña localidad fronteriza de Tijuana (Méjico), donde se encuentra con su antigua pareja de baile, Anita Dixon (Goddard), que ya dispone de visado. Iscovescu es elegante, distinguido, se comporta como un galán europeo y sabe ganarse la confianza de las damas. El inspector de inmigración de la oficina norteamericana en Tijuana es el rígido, aunque de fondo humano, Sr. Hammok (Abel). El papel protagonista corresponde a Emmy Brown (Havilland), maestra en la pequeña ciudad de Azusa (L.A.).
El film suma drama, romance y crítica social. Destaca la solidez y la gracia de un magnífico guión, que aúna vigor dramático y abundantes lances de humor. Éstos se presentan en trazos rápidos y en momentos inesperados. Se sirven de expresiones ocurrentes, situaciones chocantes, reacciones extravagantes y dosis medidas de ironía, sarcasmo, burla, humor negro y crítica. La colaboración de los dos guionistas con Leisen concluye con este film a raíz de la supresión por el realizador de una escena tragicómica en la que Iscovescu daba muerte a una cucaracha “por querer entrar en EEUU sin visado”.
Es útil y rica en detalles la descripción del ambiente de saturación, miseria y desesperación de la colonia europea instalada en la frontera a la espera de una autorización que puede tardar 5, 8 o más años. También es antológica la descripción sucinta, pero eficaz, de la variedad de nacionalidades presentes, entre ellas la de una familia austriaca, los Kurtz, recordatorio de la situación que en Tijuana había vivido (1934) durante un tiempo el propio Billy Wilder.
No faltan las demostraciones de la afición de Billy Wilder a los coches, en especial los deportivos, las autovías modernas de 4 carriles, las persecuciones de coches y motos, los paseos en coche por el campo, las perspectivas de vías de intenso tráfico rodado, la pequeña ranchera que da cabida a una cantidad inverosímil de chavales.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
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spoiler:
Muestra su afición al cine con un fragmento del rodaje en estudio de “Vuelo de águilas” (1941), protagonizada por Verónica Lake y Brian Donlevy. Presenta al director Dwight Saxon (Leisen) en acción y la legión de técnicos que participan en el rodaje. Añade demostraciones de afición a la naturaleza, los paisajes abiertos, el mar, la playa, los baños de mar, la vida. También a la entereza, la presencia de ánimo, el comportamiento discreto. Expone su aversión al engaño, la mentira, la conducción temeraria, los accidentes de tráfico, el suicidio, etc.
El estilo narrativo es contenido y prescinde de excesos melodramáticos. Narra la historia en un amplio flashback que da relieve al relato. El narrador es el propio Iscovescu, que expone los hechos desde su personal punto de vista, lo que permite seguir con aporte de detalles la evolución del personaje. Edith Head (“Una cara con ángel”, Donen, 1957) viste con sobria y discreta elegancia a Havilland y con vestidos exuberantes y llamativos a Goddard. A través de los ojos de Iscovescu, el guionista concentra en Havilland su atención y le dedica un número elevado de momentos culminantes, que realzan sus dotes de actriz dramática y su figura serena, frágil e inocente. Son escenas destacadas la de los parabrisas que hablan, el extravío a causa de la lluvia, la romería de parejas al santuario, el viaje de novios en coche, la celebración del 4 de julio en casa de los Kurtz, exiliados austriacos tras la anexión (12-III-1938) de Austria al III Reich, identificados con su nuevo país antes de entrar en él.
Exalta las sorpresas que guarda la vida, el ingenio de las personas para superar dificultades, las limitaciones de las normas administrativas, la dignidad de todas las personas, la visita de la madre embarazada al despacho del inspector de inmigración y sus consecuencias. Hace referencia a la lucha del bien y el mal, el rigor administrativo y las necesidades humanitarias, las inercias de la legalidad ante los cambios de las necesidades sociales, etc.
La banda sonora, de Victor Young, sitúa la acción en un apropiado contexto sonoro mejicano. La banda, algunos grupos de cantantes charros o el fondo musical, presentan fragmentos de “Cielito lindo”, el tango “La Comparsita”, el himno “la Marsellesa” y varias composiciones en inglés, como “California, Here I Come”. La fotografía, de Leo Tover (“El mayor y la menor”, Wilder, 1942), en B/N, hace uso de tonos suaves y contrastes moderados, que no perjudican los juegos del claroscuro. Se sirve de tomas largas, encuadres estáticos y planos próximos.
Spoiler
Narra una historia de regreso de las tinieblas a la luz, de la mentira a la verdad, de la muerte a la vida. Se contrapone a los relatos dedicados a viajes al reino de la corrupción, las tinieblas y la perdición.
Bibliografía
Guillermo BALMORI, “Hold Back The Dawn”, Notorius ed., Madrid 2009.
Carlos LOSILLA, “Si no amaneciera”, ‘Dirigido por’, septiembre 1997.
El estilo narrativo es contenido y prescinde de excesos melodramáticos. Narra la historia en un amplio flashback que da relieve al relato. El narrador es el propio Iscovescu, que expone los hechos desde su personal punto de vista, lo que permite seguir con aporte de detalles la evolución del personaje. Edith Head (“Una cara con ángel”, Donen, 1957) viste con sobria y discreta elegancia a Havilland y con vestidos exuberantes y llamativos a Goddard. A través de los ojos de Iscovescu, el guionista concentra en Havilland su atención y le dedica un número elevado de momentos culminantes, que realzan sus dotes de actriz dramática y su figura serena, frágil e inocente. Son escenas destacadas la de los parabrisas que hablan, el extravío a causa de la lluvia, la romería de parejas al santuario, el viaje de novios en coche, la celebración del 4 de julio en casa de los Kurtz, exiliados austriacos tras la anexión (12-III-1938) de Austria al III Reich, identificados con su nuevo país antes de entrar en él.
Exalta las sorpresas que guarda la vida, el ingenio de las personas para superar dificultades, las limitaciones de las normas administrativas, la dignidad de todas las personas, la visita de la madre embarazada al despacho del inspector de inmigración y sus consecuencias. Hace referencia a la lucha del bien y el mal, el rigor administrativo y las necesidades humanitarias, las inercias de la legalidad ante los cambios de las necesidades sociales, etc.
La banda sonora, de Victor Young, sitúa la acción en un apropiado contexto sonoro mejicano. La banda, algunos grupos de cantantes charros o el fondo musical, presentan fragmentos de “Cielito lindo”, el tango “La Comparsita”, el himno “la Marsellesa” y varias composiciones en inglés, como “California, Here I Come”. La fotografía, de Leo Tover (“El mayor y la menor”, Wilder, 1942), en B/N, hace uso de tonos suaves y contrastes moderados, que no perjudican los juegos del claroscuro. Se sirve de tomas largas, encuadres estáticos y planos próximos.
Spoiler
Narra una historia de regreso de las tinieblas a la luz, de la mentira a la verdad, de la muerte a la vida. Se contrapone a los relatos dedicados a viajes al reino de la corrupción, las tinieblas y la perdición.
Bibliografía
Guillermo BALMORI, “Hold Back The Dawn”, Notorius ed., Madrid 2009.
Carlos LOSILLA, “Si no amaneciera”, ‘Dirigido por’, septiembre 1997.