Recuerdo haber visto esta película el año de su estreno y recuerdo haberla disfrutado bastante. Después de todos estos años, he decidido darle un nuevo vistazo y me ha seguido gustando bastante. Es muy entretenida, tiene un conjunto de actores que no lo hacen nada mal y cumple su función de entretener sin ser nada que no se haya inventado antes.

Aquí Bruce Willis aun se tomaba en serio el trabajo de actor y llenaba la pantalla con su presencia, acompañado de un actor como es el canadiense Matthew Perry que vivió las mieles del éxito por aquella época con el enorme bombazo que supuso la serie en la que participaba, "Friends". Tanto Willis como Perry tienen buena química, dando vida a dos polos opuestos tanto en forma de vivir como en forma de actuar. Perry no ha conseguido brillar mucho que digamos fuera de la serie antes comentada, pero aquí, al menos, estaba bastante decente.

Las chicas de la película son la divertida Rosanna Arquette, la bella y cumplidora Natasha Henstridge y la siempre más que interesante Amanda Peet.

No se hace para nada pesada, se disfruta de los actores y se descubre puntos de la ciudad de Montreal, en Canadá, donde está ambientada y filmada, algo que no es habitual en el cine americano. Tengo pendiente ver su segunda parte.
Un saludo,
Tess