Hace años Paco Plaza fue uno de los responsables de una de las películas de terror más frescas del género con la impactante REC. Un film sin complejos que sacudió el panorama del cine nacional e internacional con su propuesta. Desgraciadamente con este film la historia no se repite.

Basado en un suceso real en la Madrid de los 90, uno espera que el realizador se base en lo que realmente aconteció para darnos un relato realista que nos haga crear una duda razonable de si lo que pasó fue real o no.

Sin embargo el film nos arrebata cualquier posibilidad de duda al arrastrarnos a todos los clichés que acusan las películas de sucesos paranormales. El monstruo que acecha en las sombras y sólo aparece de refilon, la anciana que sabe lo que pasa y da las soluciones mediante acertijos, la niña que sufre mientras su entorno la toma por loca y no la ayuda, las pesadillas grotescas. Se hubiese agradecido un enfoque más ambiguo, que nos presentará los hechos tal y cómo pasaron para que fuera el espectador el que decidiese por si mismo si hubo un suceso paranormal o no.

En vez de eso se coge como idea principal un suceso real con potencial para contar algo de forma distinta, para hacer una película de terror genérica que hemos visto mil veces. Pese a todo teniendo en Cuenta su reducido presupuesto y el esfuerzo de sus actores casi amateurs para que todo funcione la película se deja ver sin caer nunca en el ridículo o el aburrimiento. Siempre es de aplaudir que una película de estas características mantenga un mínimo de calidad para que el espectador no se sienta estafado. Sólo por eso merece un aprobado raspado.