Al principio parece que la película no puede prometer mucho, pero luego empieza a identificarse mucho con el espectador. Acaba retratando la realidad misma en divertidos enredos que nos pueden pasar a cualquiera. También me maravilló la interpretación de los actores, y la selección de canciones para la banda sonora está bastante bien.

También tiene una parte más emotiva y sensible. Consigue lograr, por lo tanto, un ingenio en cómo representar la realidad misma con todo tipo de emociones, como sucede en la realidad, que va desde la frustración, pasa por la risa y termina en lo conmovedor.

Es una película ideal para relajarse, aunque soy consciente de que no gustará a cualquier tipo de público. Hay algunos que quizás no se identificarán con su humor tanto como yo.