Una obra maestra para el cine. Perfecta para mí y para todos los que les guste el gran cine. Esta película le da al público de qué pensar sobre la humanidad y llega a los sentimientos del espectador con esta gran historia policiaca. Los personajes no son ni muy buenos, ni muy malos, son personajes con sus miedos e inquietudes en la vida. Grandes actuaciones de Morgan Freeman y Kevin Spacey. Los diálogos son de lo más literarios y acertados. Una cinta con dotes religiosos pero sin alabar ni insultar a ninguna religión. Película 100% recomendada para todo el mundo.