Lucy (en referencia al homínido) nos relata como debe lidiar con ella misma al momento del romperse una bolsa llena de drogas en su estómago y comienza a desarrollar poderes paranormales.

Buen intento por Luc Besson al intentar mezclar la ciencia ficción con estadísticas históricas sobre las habilidades del hombre ¿Será verdad que le hombre no es capaz de utilizar al 100% su cerebro? y ¿Es necesario usar drogas para poder lograrlo?

Cabe de destacar la interpretación de Johansson como súper mujer y en como se asemeja a la mujer que Hitler siempre soñó un soldado con poderes psíquicos, rubia y dominante. Por su parte Freeman, hizo bien su rol de profesor estoico.

Música liderada por Éric Serra quien siempre sabe darle el toque correcto a cada película de ficción, esta vez Besson no llega a darle un camino correcto a la historia, sino más se dirige tan solo a la acción y a violencia con delincuentes fuera de control y la existencia de la espinaca sagrada que te da poderes extrasensoriales.

A modo de conclusión si disfrutas con la ciencia ficción y la acción este film es ideal, con pequeñas escenas sobre la historia del hombre y como ha ido evolucionando (no si para bien o para peor). Lucy no se transforma en nada nuevo si no en una copia de Tom Raider y la Agente SALT, las cuales son una copia en mujer de India Jones y Jason Bourne.