Pequeños fuegos por todas partes (Miniserie de TV)

Esta adaptación de la novela homónima de Celeste Ng (libro que aprovecho para recomendar) planteada como una miniserie de ocho capítulos, es sin duda alguna una serie de mucho nivel. Creo sinceramente que no era nada fácil llevar esta historia a la pantalla y han sabido hacerlo de forma sobresaliente, hasta el punto de conseguir que el espectador/a sea capaz de ir sintiendo el calor de cada uno de esos pequeños fuegos hasta quemarse completamente.

El tema central del argumento es la maternidad, que será abordada desde todos los enfoques posibles: maternidad subrogada, maternidad no deseada, adopción, no maternidad, maternidad en solitario, maternidad elegida… A esto se le unen los conflictos de clase, raza e identidad.

La historia se centra en dos personajes opuestos: Por un lado, está Elena (Reese Witherspoon ) una mujer blanca de clase acomodada que tiene una familia y vida perfectas llenas de convencionalismos y reglas, y por otro lado está Mia (Kerry Washington) una misteriosa artista negra, madre soltera que lleva una vida nómada y que tiene una profunda alergia a las normas sociales. Sus caminos se encontrarán cuando esta última acude a vivir con su hija adolescente a Shaker Heights, una zona residencial perfectamente planificada, donde también viven Elena y su familia.

A pesar de la pena que me causó terminar la serie, espero que no hagan una segunda parte de la ficción, pues temo que estropearían el buen sabor de boca que me han dejado con esa fantástica adaptación del poder incendiario de la novela.

Me quedo con dos frases que Mia le dice a Elena en momentos diferentes y que creo que son geniales:
«Tú no has tomado buenas decisiones, tuviste buenas opciones».
«Lo malo de los retratos es que tienes que mostrar a la gente como quiere ser vista; yo prefiero mostrarla como yo la veo».

He de reconocer que vine aquí por Reese Witherspoon (como muchos supongo). Al principio pensé ¿que es esto? todo era bastante raro y no veía el nudo de la historia que llegaría a atraparme. Pero menos mal que me quedé a ver más (en parte por el casting).
Simplemente brillante. Me sentía tan rara viendo cada capítulo y preguntándome por qué actuaban así e intentando entender a cada personaje que eso fue lo que me enganchó a la vez.
Desde que vi This is us, he entendido que no necesito una trama desde el principio como pudiera ser un asesinato, un robo, un accidente, un misterio concreto... las simples (nada simples) relaciones entre unas personas y otras son todo lo necesario para construir una buena serie consiguiendo catarsis plena en muchos momentos.
Ahora simplemente esperare a encontrar algo que de verdad me haga sentir a los personajes como casi conocidos, sufriendo con ellos y disfrutando.

Me gusta mucho que se toquen temas peliagudos (el racismo en esta serie) sin caer en el maniqueísmo. Era muy fácil ensañarse con los blancos y mostrar a una madre negra victimizada, pero aportan puntos de vista para posicionarse con o contra cualquiera de las dos.
También es interesante cómo se buscan tramas para todos los miembros de la familia y no solo para los hijos.
Gana conforme pasan los capítulos.

Aunque en ocasiones se hace un poquito pesado el continuo drama, la interpretación es magistral y la historia es muy honesta en cuanto al enfoque de todos los temas que se plantean. Con esto quiero decir que muestra diferentes enfoques sobre dilemas morales contemporáneos, aunque estos sean continuamente recurrentes, como el racismo, clasismo, homosexualidad... Me ha gustado la manera humana en la que se representa a los personajes, con sus virtudes y sus defectos, mostrando que dentro de la misma persona podemos encontrar gestos admirables y totalmente deplorables.

Gracias Reese Witherspoon por ser una gran productora (a veces mejor que actriz) y apostar por proyectos como éste, aunque saques tu tajada para lucirte como actriz principal al igual que pasó con "Big little lies"(donde interpreta exactamente el mismo papel que aquí).
No me desvío más. Es una serie redonda y se la he recomendado a muchísima gente y todos piensan lo mismo, y la unanimidad últimamente escasea.
El tema va de madres. En concreto dos: Washington y Witherspoon. Cada cuál más atormentada. Imprescindibles y asombrosas ambas (quizás la primera un poco sobreactuada).
En un pulso constante nos muestran sus diferencias, sus imposiciones, sus líneas rojas, sus egos y su forma de entender la maternidad, aunque en el fondo los miedos que comparten las dos son muy similares.
Aborda muchos temas y creo que ésto es lo más interesante de todo el conjunto. A veces nos hablan de racismo, clasismo, prejuicios... otras nos hablan de la búsqueda de identidad, de cómo las madres a veces pagan sus errores pasados con sus propios hijos, de sueños frustrados, de traumas no superados...
Además de todo eso, se respira un ambiente de misterio, ya que no sabemos a qué se debe el raro comportamiento de Washington, creando tensión en cada momento (no sabemos por dónde va a salir la criatura ni a qué se deben sus pesadillas, aunque podemos intuir cosas).
Dos mundos que se encuentran. Dos mujeres y madres que piensan que están haciendo lo mejor por sus hijos, porque lo dicen ellas y punto.
Los flashbacks ayudan mucho a la trama y los introducen en momentos muy oportunos. Es otro punto a su favor.
Seguro que te identificas con muchas cosas. Como ya he dicho se abordan tantos temas que te verás identificado con alguna situación o incluso con más de una.
Quiero resaltar, como amante de las artes plásticas, que hay escenas visualmente muy atractivas aprovechando que el personaje de Washingtom es una artista: la bicicleta que rediseña para su hija (con todo esos símbolos identitarios de la niña), el montaje fotográfico que arde...
Es una serie soberbia. El final es además magistral (tremenda actuación la de Reese aquí) aunque te deja con las ganas de saber más (espero que haya una segunda temporada). Le doy un 10.