En la categoría de cine de aventuras y desastres se sitúa este estreno que entretiene en su extensión situando a sus personajes que son cazadores de tornados entre el deber y arriesgar sus vidas.

La verdad no sabía que estaba frente a un remake de un clásico del cine de aventuras y desastres hasta que un día me encontré con este estreno que lo conocí por un afiche instalado en un cine local. Se trata de “Tornados” y se me vino a la mente esa cinta del director Jan de Bont(Máxima Velocidad) de 1996, protagonizada por el fallecido Bill Paxton y la maravillosa Helen Hunt. Pues bien ahora convertido en un clásico del cine de aventuras y desastres con una icónica vaca jalada por el tornado que pasa por delante de la camioneta se estreno una nueva versión en el verano de USA con un guión muy similar pero con un diseño de producción y mejora de ritmo que asegura entretención.

La trama gira en torno a Kate Carter (Daisy Edgar-Jones) es una ex cazadora de tormentas perseguida por un devastador encuentro con un tornado durante sus años universitarios que ahora estudia los patrones de tormentas en un centro del clima en Nueva york. Su amigo Javi (Ramos) la trata de convencer de regreso a las llanuras abiertas para probar un nuevo e innovador sistema de seguimiento de tornados. Allí, se cruzan con Tyler Owens (Powell), la encantadora e imprudente superestrella de las redes sociales que disfruta publicando sus aventuras persiguiendo tormentas con su variopinto pero efectivo equipo que gustan de las aventuras y jactarse de ellos en redes sociales.
A medida que la temporada de tormentas se intensifica, se desatarán fenómenos aterradores nunca antes vistos, y Kate, Tyler, Javi y sus equipos se encuentran de lleno en el camino de múltiples sistemas de tormentas que convergen sobre el centro de Oklahoma en la lucha de sus vidas. Kate carga con el tormento de haber arrastrado a compañeros de la universidad y a su pareja a su sueño que no salió bien, tema que la persigue durante todo el desarrollo del film
La carga dramática de su protagonista y su ángel son sin duda un punto fuerte de la realización que dirige Lee Isaac Chung, que increíblemente tiene un registro anterior en una cinta minimalista como Minari y no defrauda en su paso a las grandes ligas. Glen Powel que asomó como el pedante piloto en “Top Gun Maverick” y sorprendió recientemente con “Hitman”, aparece nuevamente como el jovencito del film transmitiendo mucha seguridad como el cowboy y youtuber que caza tornados como si fuesen vacas y sin duda aporta comicidad y plantea interesantes desafíos a los equipos más doctos.
En resumen es un film familiar, bien palomitero, que lleva a los protagonistas de un tornando a otro de diferentes categorías y poblados. Más allá de los aportes científicos que pueden ser cuestionados por expertos es un film que también invita a reflexionar en torno al poder que tiene la naturaleza y que es difícil pronosticar o preveer diversos escenarios que puedan poner en resguardo a los ciudadanos. Los efectos visuales y sonoros están a la altura pero se extraña un poco esos actores de la original que se compenetraron de maravilla sin formar mucho la trama para su unión como una pareja que estaba al borde del divorcio algo que acá corre por otra vía el encuentro de estas dos visiones.

Twisters (2024).
"Un tornado solo podemos clasificarlo según lo que destruya o nos arrebate."
Universal Pictures, Warner Bros. y la productora de Steven Spielberg -quien aquí hace labores de productor ejecutivo- nos traen la revisión del clásico de 1996, "Twister".

Ambientada y filmada en el estado de los primeros colonos, Oklahoma, el filme lo protagoniza en esta ocasión una dama: la atractiva actriz británica Daisy Edgar-Jones, a quien aún no pondrán cara la mayoría del gran público.

En el papel del malote malparado que en su momento interpretó Cary Elwes, tenemos al guaperas de Glen Powell, visto recientemente en la comedia romántica "Cualquiera Menos Tú" y junto a Cruise en la magnífica "Top Gun: Maverick", pero solo en los primeros compases de la historia. Afortunadamente para él, su alter ego evoluciona más allá de lo que lo hiciera Elwes hace tres décadas. El tercero en discordia es Anthony Ramos, protagonista de la última entrega de los multivalentes Transformers.

"No hay que afrontar los miedos. Hay que domarlos."
Aunque ya no contamos con la presencia de actores de la valía de los desaparecidos Bill Paxton o del mismísimo Philip Seymour Hoffman, ambos componentes del cast de 1996, la que hoy nos ocupa encuentra la manera de entretenernos -y no solo a los seguidores del subgénero de catástrofes- gracias a un guión donde la interacción de los personajes es primordial y a unos efectos visuales y sobre todo, de sonido (Skywalker Sound) que nos harán olvidar durante algo más de dos horas cualquier preocupación de nuestras mundanales vidas.

Raúl Cabral.
Puntuación personal: 7
https://www.filmaffinity.com/es/film397363.html

Una grata secuela esta nueva película del universo Twister, no sé si podría catalogarla como secuela, ya que vínculos o referencias a la original hay muy pocos, pero tampoco lo hace falta, porque funciona muy bien por sí sola.

La ambientación y esencia de la original están intactas lo cual se agradece y juntas hacen buen tándem. Hay cierto giro ahí con los personajes que funciona y es una película que entretiene mucho.

Las escenas de los tornados en sí, sus desastres, y demás, están muy bien realizadas, por momentos crea momentos de tensión y en términos de efectos especiales está muy cuidada, el apartado sonoro es muy bestia.

En general la he disfrutado mucho, no es que sea una secuela al uso, sino más bien una nueva historia dentro de este mundo de los caza tornados, aunque me hubiera gustado alguna vinculación con aquella, su banda sonora y la música que hay en ella funciona y se hace amena.

La recomiendo si te gustan las películas de catástrofes y si te gusto la original, ya que usa muchos elementos de aquella, pero actualizándose a la actualidad con algunos cambios y giros interesantes.

NOTA: ★★★★ (7/10)

La película es una mierda.

No me esperaba gran cosa pero algunas críticas profesionales (ya me vale a mi también) me han hecho intentar tragarme este esperpento. Hubo un momento, lo juro, que pausé la película para comprobar que las críticas que había leído eran de esta película.

Y digo intentar porque abandoné a escasos 35 minutos de su final. Si escucho un gritito yankee más, salto por la ventana. Y no es plan.

La verdad es que empieza horrible. Cuatro o cinco payasos adolescentes super guays persiguiendo tornados en una tartana. Imbéciles además, que te caen mal desde el minuto 1. Eso no ayuda a que no quieras que sean absorbidos por un tornado.

En fin, que pasa el tiempo y el grupo, por lo que sea, se reduce. Gracias a dios porque si ese era el plan no le doy ni 15 minutos. Pero lo que no se reduce son:

- Personajes estereotipados a más no poder.
- Personajes metidos con calzador. ¿Por dios que pinta el negro en todo esto?
- Situaciones ridículas solucionadas con decisiones estúpidas.
- Relaciones amorosas que NOS DAN IGUAL.
- Efectos digitales que no mejoran en absoluto la película original, 85 años después.

Una americanada (joder, que el prota con sombrero de cowboy se lleva a la pava a un rodeo para meterle fichas), que no hay por donde cogerla.

Lo bueno es que le sube la nota la Twister original. Esta es un truñaco de los gordos. Maldito Hollywood y malditos remakes.

Yo vi la película, de la que se supone que esta es un remake, o secuela o algo.., de muy pequeñita y me fascinó. Luego la vi de más mayorcita y la entendí mejor. Me metió de lleno en la historia de la protagonista, en su complejo carácter y todos los secundarios completaban la historia.

La película tiene un sentido: la prota quiere conseguir algo, lo intenta y al final lo consigue, junto con vivir otro gran tornado. Siento que tiene ritmo, hay un principio, un porqué, y las cosas van evolucionando.
También evolucionan en lo personal con la llegada de su ex complicando así su situación personal, más bien emocional, al tener que enfrentar el trabajo y con la expectativa de un EF5; que creo es el que viene en la parte final de la peli.

No sé, puede que al tener la otra peli presente viendo esta no me deje ver la parte positiva de ésta, pero me ha sido inevitable.

En esta sin embargo no hay nada de eso. Está la chica que tiene un trauma, por lo que deja de perseguir tormentas. Lo que es Dorothy y consiguen al final en la otra Twister de 1996, aquí ya lo tienen al principio. El concepto ya "lo dominan" me refiero cuando en la otra es una novedad, es el triunfo del final.