Framed

Hay cineastas que igual les da rodar un film de acción, una comedia o un musical. Su maestría puede con todo y, aunque llegan a ser algo impersonales, la calidad del producto final está garantizada. Valga como ejemplo el director japonés Takashi Miike. Hay otros, sin embargo, que dejan su sello personal y hasta con los ojos cerrados podrías identificar al autor. En este otro extremo tendríamos a Michael Haneke. Marc Martínez Jordán pertenecería a este segundo bloque y lo pongo en condicional por la corta carrera del director catalán desarrollada hasta hoy. Las maneras apuntan en esa dirección. Tras ver Framed eso se confirma con creces.

La forma de rodar es muy sutil puesto que tras unas imágenes llenas de sangre, casquería y amputaciones, se esconde una sucesión de situaciones altamente amenas y divertidas junto a algún que otro mensaje más o menos acertado. Ver en pantalla ese descenso a los infiernos con esa violencia llegaría a cansarnos ya en el minuto dos. Pero el guion, obra de Jaume Cuspinera y el mismo Marc Martínez Jordán, sabe trabajar al público. Lo lleva en volandas (como se suele decir). Parece que, cuando está perdido entre tanto gore, la mano de la ironía aparece a través de unos inteligentes diálogos, y los rescata para así coger fuerzas hasta la siguiente situación digamos que movidita, que haberlas haylas.

Otra cosa es la historia. Se sustenta básicamente en lo terrible que pueden ser las nuevas tecnologías, dicho esto con algo de sorna, que conste. A ver quién es el guapo que después de publicar cualquier cosa, noticia, estado de ánimo, cambio de pareja o lo que sea, no está ya mirando cuantos likes tiene o si alguien ha colgado algún comentario preferiblemente positivo. Esto, que podría parecer banal a simple vista, llevado hasta el extremo nos puede llevar a un relato cruel, violento e inverosímil (o no), de la sociedad actual, más pendiente de las formas que del fondo.

Framed es una página web donde los usuarios pueden transmitir en directo desde sus teléfonos móviles durante 24 horas. La guerra por la audiencia ha comenzado. No hay normas, límites o censura.

En una obra de estas características, el trabajo actoral queda un poco diluido entre tanto protagonista. En Framed pasa todo lo contrario. Cada personaje, dibujado con dos pinceladas, tiene una participación importante, aunque a algunos les penalice excesivamente un doblaje algo burdo. Y no hablo solo de los que aparecen más tiempo en pantalla, los que lo hacen poco se recrean al llegarles la oportunidad. Destacaré a Àlex Maruny, uno de los más prometedores actores del panorama actual español, y que aquí tiene un trabajo estelar y algo sangriento. Seguimos con un comedido Joe Manjón, un alucinante y divertido Daniel Horvath, un sorprendente Enric Auquer y un correcto Biel Montero. En la parte femenina, todas magnificas, Clàudia Pons, Júlia Molins, Mercè Montalà, y Ann Perelló. Mención aparte merece José García Ruíz, en un papel algo ambivalente y salvaje pero representado de manera magistral ya que da en el clavo en un personaje al que le es igual ocho que ochenta.

He dejado para el final la excelente fotografía de Yuse Riera y un departamento de maquillaje para quitarse el sombrero, capitaneado por David Chapanoff y Laura Lorenzo.

Una gran película de la cual disfrutaréis tanto si os gusta el gore como si no. Los primeros van servidos, los segundos solo tienen que escarbar un poco para encontrar la capa de la calidad.

http://www.terrorweekend.com/2017/11/framed-review.html

Si "La naranja mecánica" se hubiera estrenado en nuestros días quizás hubiera tenido un argumento similar al de esta cinta de terror, que hiperboliza el poder de las redes sociales para convertirlas en el verdadero psicópata que aterroriza nuestra sociedad.

Un mensaje muy actual que sirve como excusa para ofrecernos un slasher al uso en el que la sangre y las retorcidas torturas del asesino protagonista, brutalmente interpretado por Àlex Maruny, ponen los pelos de punta e incluso hacen que debamos apartar la vista en varios momentos.

Resaltar además su elaborada puesta en escena y una excelente fotografía que consiguen que esta producción parezca menos modesta de lo que realmente es.

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Una buena película del director catalán Marc Martínez, que sin duda te pondrá los pelos de punta en mas de un momento. Lo sorprendente, la facilidad con la que consigue engancharte a la trama y el dinamismo de las escenas, que hace que se pase el tiempo muy rápido. Sin duda una película entretenida que lleva al extremo el uso de las redes sociales, y como en estas pueden aparecer fenómenos terroríficos como los presentados en la película.

Me ha sorprendido gratamente para bien la puesta en escena del film. El director consigue llevar al extremo su gamberrada visceral de cosecha propia, que hace que haya que apartar la vista en mas de un momento. Muy recomendable.

Después del visionado en el Fant Bilbao, Framed se podría catalogar como ese tipo de película que aunque tiene un presupuesto muy bajo consigue ser un producto de cine de terror más que convincente además de ser entretenida a toda costa sin importarle cargarse los convencionalismos clásicos del slasher.

Framed es una locura sangrienta y frenética destinada a los amantes del género, pero a su vez posee una lectura crítica y humorística en segundo plano que le da una dimensión especial al film. Aunque según las palabras de Marc Martínez, el director, Framed no pretende ser una crítica a la adicción a las redes sociales, se percibe un discurso claro en ese sentido en ciertos momentos de la película.

Cosas buenas de Framed. Primero, es una película que es puro entreteniniento, no hay momento aburrido durante el desarrollo de los acontecimientos. Desde la secuencia inicial todo se vuelve retorcido y maquiavelico. Cada secuencía es más y más bestia, más sangrienta y retorcida, el desarrollo de los acontecimientos siempre es desconcertante y rompedor, en este sentido vale la pena verla porqué te sorprenderá.

Segundo, tiene un antagonista increiblemente bien interpretado por Alex Maruny (el club de los incomprendidos, Promoción fantasma, etc...). Su interpretación hace que la película sea mucho mejor en su globalidad (cuando digo todo, es todo). Solo vale la pena verla para verle en acción.

Tercero, cómo decía antes, es una película frenetica, zero aburrida, el director y guionistas han extirpado todo aquello que podría relentizar la acción, desde mi punto de vista es un punto a favor sobretodo para los que vemos mucho cine de género y sabemos la cantidad de escenas cliché que hay en muchas ocasiones.

Cuarto, la violencia es extrema y no te dejará indiferente. Aun siendo una peli indie los fx de maquillaje estan muy logrados.

Quinto, visualmente es una película muy potente, aun siendo de bajo presupuesto, las localizaciones están repletas de colores de neón, todo muy electrico, semejante a los clásicos filtros de instagram, hurra por el director de foto.

Cosas de Framed que no me han convencido. Primera cosa, el desarrollo de personajes protagonistas se estanca a la media hora dejando paso al festival de sangre y visceras. Hay una trama entre el protagonista y Bea, su ex-novia, que no se recupera. En ese sentido hecho en falta un poco más de desarrollo, más psicologia de los "buenos de la película".

Segundo, hay personajes demasiado surrealistas. El retrasado es uno de ellos, el otro malo disfrazado de anime (que no se si es un hombre o una mujer), es otro. Son personajes demasiado increibles y la historia no va acorde con ellos, me sobran en varios momentos.

Tercero, la poca explicación que hay sobre ciertas drogas que utiliza el malo (Alex Maruny). En ciertos momentos el malo usa ciertas drogas que parecen salidas más de la mente de los guionistas que de algun camello de la esquina de tu casa.

Cuarto, no explotar más la crítica social de Framed. La película es entretenida y divertida, pero subiria de nivel si hubieran invertido fuerzas en desarrollar la crítica a la obsesión que está desarrollando la gente hoy en dia a las redes sociales.

En conclusión, Framed vale mucho la pena verla. Y se merece mucho respeto y admiración tirar adelante una peli así, sin casi presupuesto, en España.

“Framed” es el título de la película y el nombre de una nueva aplicación que está arrasando en Internet. Se basa en YouTube o Twich, y permite hacer vídeos en directo en streaming para que la gente se conecte y vea lo que está sucediendo, pero con una particularidad: ningún tipo de contenido es censurable. Eso hace que los vídeos escatológicos, con alto contenido sexual o violentos, sean permitidos, y en realidad, se conviertan en los más vistos de la plataforma. Unos jóvenes sufrirán en sus propias carnes (nunca mejor dicho) una de las retransmisiones mas sanguinarias nunca vistas, en las que tres desalmados irrumpirán en su fiesta y se dedicarán a torturarlos para conseguir cada vez más audiencia. Marc Martínez Jordán ha conseguido un slasher con los clichés típicos del género con una gran factura técnica y sazonado con una historia sencilla pero efectiva en la que tiene cabida la crítica a las nuevas tecnologías, al uso de las redes sociales y al morbo que tenemos como espectadores ante imágenes de más que dudable interés o calidad. La película tiene todo lo que un aficionado al género está esperando ver: jóvenes a los que deseas que pasen por el cuchillo, asesinos desalmados con peculiaridades extremas en su comportamiento y físico, bastantes escenas gore y un sentido del humor muy negro y que funciona de forma genial. Una obra para un público muy específico, que encaja a la perfección en un festival de terror y a la que se le perdonan sus carencias en el guion y en determinadas actuaciones al conseguir lo que se propone, darnos diversión a lo largo de sus 80 minutos escasos de duración. “Framed” se estrenó en el Festival de cine de terror de Molins de Rei en el que tuvo una buena acogida por parte de su público. Gamberra y muy divertida.

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