Genial película con dos papelones de Johnny Deep y Benicio del Toro. Una peli de drogas con buenas dosis de humor pero del bueno, nada de "humor yankee". Las situaciones en las que se encuentran son muy cómicas, al igual que su comportamiento (debido a las drogas, evidentemente).

Un Johnny Deep impulsivo e hiperactivo que te hará sonreir escena sí escena también.

Es la película con la que más me he reído sin duda. La primera media hora es sensacional, sobretodo por el papel que hace Benicio del Toro que lo borda. Deep también borda su papel, aunque tal vez tenga demasiado protagonismo.

Es una oda a las drogas. Una película surrealista que no te puede dejar indiferente. Le sobra algo de metraje y al final se hace un poco larga, pero cuando la has digerido te deja un buen sabor de boca. Es de esas películas que me pongo de vez en cuando para levantarme la moral y echarme unas risas.

Sin querer extender mucho esta mi primera crítica escrita de una película, aconsejaré a posteriores curiosos del visionado de este film que ahorren el tiempo.
Si en "12 monos" o el "rey pescador" me cautivara el mundo "mágico" de Gilliam, en esta cinta me siento como cuando escucho los "bonus" que en ocasiones meten hasta los mejores grupos musicales para rellenar, y es que todo en la película esta vacío, vacío de gracia, intriga, magia, acción ... da igual sea lo que sea lo que busquen en ella, aquí no lo encontrarán, tan solo una gran actuación en mi opinión de los actores protagonistas y un buen ejercicio de filmación para mostrar los eféctos psicodélicos- destructivos del consumo indiscriminado de drogas .
Quizás la película sea solo eso, un alegato en ..... "contra" de las drogas, porque viendo lo mal que lo pasan los dos imbéciles se te quitan las ganas del sábado noche.

Aburrida, sin mas, lo de comedia se lo dejan en el camino ya que no creo que nadie se ria a carcajada limpia con dos tipos puestos hasta las cejas de montones y montones de pastillas y polvos blancos.
Para mí, que ni fumo ni bebo, es simplemente un reflejo de lo que se vivía en los años 60 y 70 con todo el rollo hippie pero sin dudarlo, calificaría esta película como una absurdez. Sentido cero y mucha droga, son las dos cosas de lo que podría presumir esta película y muchos más ámbitos de los que carece.
Sinceramente se lleva un aprobado raspado por salir Cameron Díaz 10 segundos contados y por la actuación de Johnny Depp en su papel de tipo raro que anda aún más raro si se puede.

Delirios y sin sentido es de lo que va esta película. Es original, es diferente, buenas actuaciones y momentos divertidos. Muy grandes Deep y Del Toro, y muy buenas las sensaciones de drogadicción que trasmiten ellos y los efectos.

Sin embargo me molesta que la historia no nos conduzca a nada (aunque esa es la pretensión de la película precisamente), y se me hace algo larga y pesadita a veces.

Comprendo por lo que le pueda encantar a alguien, pero no lo comparto, creo que si hubiera mezclado todo lo bueno que tiene con una historia de verdad, que realmente nos llevara a algo, podría haber sido mucho más.