La invasión de los hombres del espacio

No miden más de metro y medio de altura. De enorme cabeza y manos, sólo tienen una finalidad: acabar con la raza humana y con todo bicho viviente que se encuentre en su camino. De aspecto feroz y de color verde-guión (pues la peli es en blanco y negro) suelen emitir un ruido agudo no tan ensordecedor. Odian la luz por lo que sólo se les puede ver de noche entre los matorrales cercanos a una colina donde los jóvenes birras en mano suelen saciar sus apetitos sexuales. ¡VAYA VOAYEUR!. Viajan en platillos volantes que, eso sí, todo el mundo puede ver.

Su maldad no tiene límites. Si por casualidad atropellas a uno con tu Chevrolet del 45, ellos no sólo se cargarán a un terrícola, sino que abollarán tu coche, colocarán el cadáver del terrícola en lugar de su congéner y harán lo posible para que te metas en un lío con la poli. A fin de cuentas, ¿quién se va a creer que has atropellado a un hombrecito verde si todos los indicios llevan a que conducías ebrio?. Lo dicho, su maldad no tiene límites...

Suelen atacar por la espalda (entre lo de voayeur y esto me están empezando a caer bien estos cracks... :-DD); bueno, pues atacan por la espalda clavando en el cuello sus cuatro agujas retráctiles que tienen incrustadas en la extremidad de cada dedo. No les importa si eres un humano o vaca (ya hemos dicho que odian a todo bicho viviente). Sus manos cortadas tienen vida propia.

Cada una de las agujas retráctiles tiene una dosis de alcohol 100% mortal... si has bebido algo de alcohol aunque sólo haya sido una birra. En cambio, si eres abstemio, no has de temer nada de nada: tras su ataque simplemente te despertarás con un resacón del ocho.

Y es monstruo del mes porque de esta película ("Invasion of the saucer men" de Edward L. Cahn [1957]) se sacó Matt Groening el aspecto de "Morbo", el periodista que odia a los humanos, de la serie Futurama. Del remake de los 60, mejor no veais cómo es el monstruo, que parece que lleve un pijama...

El ataque a la vaca es realmente una escena IMPRESIONANTE que puede herir la sensibilidad. :-DD

Algo curioso me ocurrió con esta película. Es tan, pero tan mala, como todas las de su clase, pero es muy, pero muy, entretenida. Es raro, pero al visionar estas películas norteamericanas de cine B de los años 50, uno la pasa realmente bien. Me retrotrae a tardes de cine televisivo de los años 60, cuando era un niño, y estos esperpentos cinematográficos me llegaban a asustar, y me hacían esperarlos ansiosamente en el televisor blanco y negro familiar, a la siesta, o a la tarde, los sábados y los domingos, con sólo dos canales de televisión; o en tardes de verano en que la televisión empezaba a las 18 horas. Película para mayores de 40 sensibles a la nostalgia. Cine de culto a lo grande.

Comedia de ciencia ficción.
Pasar a zona "spoiler"

Efectivamente, como alguien dice por ahí, se trata de un mediometraje cuyo mayor valor en alza está en su contenido tan inofensivo como rescatable por su carácter documentalista para consagrados directores de la talla del propio Tim Burton.

La película es un clásico de ficción de los cincuenta, un clásico desfasado y cándido, pero de alguna manera esa candidez la mantiene viva. Tal vez sea su fotografía en blanco y negro, tal vez sus diálogos, acaso las escasas y cutres localizaciones o incluso los propios marcianos y sus "inquietantes" platillos volantes, no se, pero hay algo que convierte a estas producciones en pequeñas joyas merecedoras de su revisión y reivindicación.

Yo creo que estos alienígenas, fueron de inspiración para Tim Burtn en "Mars Attack"; ya que son muy parecidos. Nada más verlos me recordó a ellos.

En un principio la película iba a ser una película de terror seria, pero poco a poco se fue convirtiendo en una comedia de terror, aunque tampoco veo mucha comedia, de terror (para los años 50) sí que lo veo.

Vemos una mano cortada, que me recordó al cartel de "House, una casa alucinante" donde hay una mano tocando a un timbre.

Como siempre, el cartel de esta película vemos a una mujer en posesión del malo, teniendo en cuenta que los alienígenas eran enanos, pues el cartel es un engaño absoluto.

Es curiosa de ver, como película de terror de serie B de los años 50, pero poco más.