The Lords of Salem

He leído que ésta es la película más personal de su director, quién para mí no es para nada el supuesto innovador del género ni mucho menos, como muchos lo ven o quieren hacer creer, ya que sus anteriores película, todas ellas refritos de clásicos del terror, lo único que les añadio con su toque, fue más violencia explícita, nada más.
Bueno este título, es algo diferente a eso, se trata de una historia sobrenatural, sobre lo que paso con las brujas de Salem, y bueno el director al que supuestamente ha dicho sus productores le pidieron algo original, o mintio o no le dio la cabeza para pensar en algo, ya que la película no es más que una copía de El bebe de Rosmery como muchos han dicho, pero tambvién de Suspiria, de Argento, de hehco en cuanto a la trama y la atmosfera, claro que sin llegar un momento a la calidad estética de la obra de Argento, se queda muy por debajo, la película se torna muy predecible, además de absurda, y en último casi la estética al final pierde sus pretenciones de copiar a películas clásica, y se podría decir que se vuelve un video de Lady Gaga.
Lo mejor, los actores casi todos haciendo un buen trabajo, sobre todo las que interpretaron a las brujas, su trabajo es mucho más consistente que sus personajes.

Una lástima la película que ha hecho Rob Zombie porque después de sus últimas películas esta prometía mucho. Lamentablemente no deja de ser una paranoya pseudo psicodélica donde no hace más que provocar contra la iglesia (cosa que no me parece mal) pero rozando el mal gusto y sin sentido. La película tenía muy buen comienzo pero en la mitad empieza a emparanoyarse para perder toda la gracia que tenía y convertirse en una película lenta y aburrida (tal vez demasiado personal). Lo único que se salva es Sheri Moon Zombie.

Entiendo el descabello a este arriesgado envite de Zambomba, pero no lo comparto en absoluto.

Alzo el pulgar tímidamente, con bastantes reservas y contemplando el jinco eso sí, pero desde luego no puedo decir no a este indescriptible ritual satánico y ferviente homenaje a la cabra que nos ha visto crecer y nos tantea día sí y día también.

Se nota que Zambomba eyacula sin sorpresa por el estandarte del mal, convirtiéndolo en insignia y apostando al perdedor y si para ello debe defecar sobre la iglesia, defeca, al fin y al cabo, cree que la cabra puede volar, y yo, aplaudo el intento, un intento plagado de referencias, sirviéndose de lo que le gusta, pasado por su filtro personal.

Messi y Stanley Cubiertas ajardinadas son los más claros referentes, pero no todo sale bien en esta reivindicación del reino de la pitonisa lola, donde una indescriptible mezcla tiene lugar con las chicas de oro, enanos coñones y cefalópodos lubricando y bailando un claqué ,llegando a recordar incluso a alguna canción del Chivi en ciertos momentos.

Para Zambomba parece que todo es posible, y nadie es más que nadie, salvo la cabra, además, chirría poderosamente en varios pasajes una estética preciosista, pulcra y de procesión de Semana Santa en clara confrontación con otra turbia, oscura, y decadente, no me termina de encajar.

En fin, un experimento difícil, para no recomendar alegremente donde la gente que se masturbe con lo necessary evil seguramente pueda sacar algo de papel higiénico, la cabra, es la cabra, no lo olvidemos, apostemos por la cabra, y dejémonos de barbas y cruces encima de la pizarra, salvo que sean ZZTop, claro.


Se despide desde los aledaños de Las Gaunas.

El hombre que jamás fue visto a plena luz del día con un sostén, el hombre que dando tres volteretas emulando a Gervario Deferr se coló en la misa de los domingos y aporreó con su glande tamaño fresón de Huelva a un encorbatado ciudadano haciendo escupir de su bolsillos un par de sobres con estampitas y un carnet de afiliación al Partido Popular, el hombre que dibujó a Cobi empalmado en la prueba caligráfica, el hombre que desde 10 m de altura lanzó los dientes al suelo de un cardenal con tienda de campaña en Splash para posteriormente, hacerle rodar como un neumático pirelli y tras múltiples rodillazos y patadas hueveras logró la mejor caída renqueante, vuelo posterior y puntuación final jamás vista sobre un trampolín por un consejero del Papa.

Gabi Amato.

Porque, porque, porqueeee!!!! Rob nos ha defraudado.
Los que somos seguidores de las películas de este, hasta ahora para mí esplendido director, nos hemos llevado un chasco monumental, acostumbrados como nos tenía a películas bizarras, nos encontramos con un metráje carente del estilo propio de Rob Zombie.
Sentados en la butaca de la sala del festival de Sítges, esperamos viendo como pasan los minutos que la película arranque, hasta que nos damos cuenta que esto no va a ocurrir, TREMENDAMENTE LENTA.
Rob presenta Lords of Salem como uno de sus vídeo-clips, con fotogramas potentes visualmente, y antepone esto a todo lo demás, abandonando la trama (carente de innovación), y abandonando incluso a sus personajes, dotándoles de papeles insulsos pobres y sin ninguna personalidad.
En definitiva, exceptuando por por la banda sonora, por algunas contadas escenas que te hacen recordar que Rob es el director y por la presencia de la guapa Sherri Moon (aunque su interpretación deja mucho que desear) esta película desgraciadamente es a BULLLLLSHIT.