Pues sí, este filme noventero pero con aires de los ochenta nos muestra una especie de ET robótico, el tal "Evolver", que acaba en una familia de acogida como resultado de un concurso de videojuegos. Su aspecto recuerda claramente al alienígena de Spielberg; es rechoncho, bajito, tiene una cabeza en forma de T y un brazo extensible que alarga, con unos dedos largos y su pecho también se ilumina, además de hablar de cierta manera ingenua. El robot aprende viendo la tele, pero le gustan demasiado los sucesos. Y hay más similitudes con ET; la familia está rota, con el padre divorciado, el protagonista tiene una hermana pequeña como Drew Barrymore y la madre, Cindy Pickett, recuerda mucho a Dee Wallace.

Por lo demás, es la típica película de jovencitos de Instituto enfrentados a un peligro letal en un suburbio estadounidense. Inteligencias robóticas asesinas de videojuegos ya las hemos visto el "Arcatrón"(1993), aquí sin embargo el terror es más físico, un robot muy espabilado a la hora de transformar cualquier cosa en un arma, un ET asesino que no parará hasta llegar al game over. Algo parecido lo llevó al cine Jim Wynorski en 1988 con su "Robots asesinos AKA Chopping Mall", aunque en un centro comercial.

La película es entretenida. Cumple con lo esperado. Quizás el robot es demasiado pequeño y piensas ¿porqué no le das una patada? pero bueno ¿Y Chucky o cualquier perro asesino? Posiblemente el tamaño no importa, sino las intenciones y en eso Evolver tiene muy malas pulgas.

Que no haya película sin crítica. Empezamos.

Película de la típica familia americana: padres divorciados con hermana que se mete donde no le importa, su mejor amigo sufre bullying en el intituto, ya que es tan friki como él, su nueva amiga-novia acaba de mudarse desde otra ciudad...

Aquí tenemos a un hacker-gamer que va en vespa a todas partes, con su nueva amiga de paquete. Me recuerda bastante a "Juegos de guerra", cambiando la derbi por la vespa. Sus actuaciones no son lo más destacable del film, siendo el gran protagonista el robot. Está bien diseñado (un poco paticorto para mi gusto), aunque tendrian que revisar su puntería.

La película trata de un robot que nunca quiere perder y se le cruzan los cables, pasando de modo juego a modo asesino. Aunque todo está demasiado explicado, hubiese preferido que no fuese tan explicita.

La música es demasiado machacona para mi gusto, pero los efectos especiales, para ser una cinta de los años 90 y serie B, no están mal.

Conclusión: es una película entretenida, para pasar una tarde, sobre todo si te gustan las películas de sci-fi donde las máquinas se estropean y se vuelven psicópatas.